La investidura del expresidente de la Assemblea Nacional Catalana, Jordi Sànchez, no parece llegar a materializarse. El juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena, pero también la CUP y ERC, inmersos en sus propios conflictos, son los principales obstáculos que de momento impiden al expresidente Carles Puigdemont ver a su candidato elegido y, a la vez, erigirse él mismo en presidente simbólico para dirigir Cataluña a través de su "govern paralelo" en Bruselas.
Precisamente este sábado, Puigdemont aprovechaba una reunión con los diputados de JxCat en Villafranca del Penedés (Barcelona) para arremeter contra Llarena después de que el magistrado denegase a Sànchez el permiso para salir de la prisión y acudir al pleno de investidura: "¿Es más importante un juez que más de 2 millones de catalanes?".
Puigdemont ha acusado a Llarena de "usurpar la función que en democracia tiene el Parlament" y se ha preguntado de qué han servido entonces las elecciones: "¿Es un juez el que debe decidir si Jordi Sànchez puede ser o no investido por un Parlament escogido de manera libre, que representa la soberanía del pueblo de Cataluña y tiene toda la capacidad legal para poder escogerlo presidente? ¿De qué democracia estamos hablando?".
ERC intenta sortear la "crisis Salvadó"
A pesar de que el presidente del Parlamento catalán Roger Torrent (ERC) haya "echado un cable" a Puigdemont aplazando el pleno de investidura, lo cierto es que Esquerra Republicana se encuentra ahora mismo centrada en apagar sus propios fuegos, especialmente tras la publicación de la conversación del exsecretario de Hacienda, Lluis Salvadó, en la que proponía elegir como consejera de educación a la mujer con "las tetas más gordas". Y a pesar de que el propio Salvadó ha pedido disculpas y ha reconocido que la conversación no era adecuada, no es suficiente para la CUP, el PSC e incluso las propias juventudes de ERC, que piden su dimisión.
Desde la cúpula de Esquerra lanzan balones fuera y la secretaria general del partido, Marta Rovira, ha lamentado el comentario pero también ha anunciado que estudiarán las "acciones legales oportunas" para denunciar la filtración.
Por su parte, la CUP sigue aprovechando la coyuntura para apretar al resto del bloque independentista. Los antisistema, que ya avisaron de que sus tres diputados se abstendrían en la investidura de Sànchez, piden un mayor compromiso con el proceso de construcción de la república y avisan de que el nuevo documento que les han transmitido JxCat y ERC con una propuesta de programa de Gobierno a cambio de su apoyo tiene "carencias importantes" y no ven diferencias de fondo con la última propuesta que rechazaron.
Ponsatí abandona Bélgica
Los exconsejeros Antoni Comín, Lluís Maria Puig y Meritxell Serret, que permanecen fugados en Bélgica, han admitido en una entrevista en el Punt Avui que prevén que la justicia española reactive la orden de extradición contra ellos. La que se ha cansado de esperar en territorio belga es la exconsejera de Enseñanza Clara Ponsatí, que este sábado ha anunciado que abandona Bélgica para reincorporarse a la Universidad de Saint Andrews, situada en Escocia (Reino Unido).
Aun así, dice Ponsatí que seguirá comprometida con la independencia de Cataluña y que ahora "habrá tres países donde habrá exiliados catalanes", en referencia a que ella estará en el Reino Unido, varios exconsejeros y diputados en Bélgica, y la exdiputada de la CUP Anna Gabriel en Suiza.