El exministro del Interior Jaime Mayor Oreja ha considerado que la reacción española a la "crisis" actual debe pasar por una unión de los que son los tres actores políticos principales: PP, PSOE y Ciudadanos, partido, ha dicho, en el que no confía, aunque lo ha calificado como "el nuevo orden mundial".
En una nueva sesión del Foro de la Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón (ADEA), Mayor Oreja, quien ha hablado como responsable de la fundación Valores y Sociedad, ha señalado que en las sociedades europea y española se da una división entre un "populismo" del que le preocupa "todo" y un "nuevo orden mundial", que implica la pérdida de los referentes y de valores de la civilización cristiana.
Del PP ha evitado hablar, pero sí ha hecho algunas consideraciones sobre otras formaciones, como Podemos, que ha caracterizado como "la expresión" del populismo que criticaba antes. Ha añadido que la irrupción de este tipo de partidos proviene de gente que "está enrabietada con su propia vida" y que "no se acepta a sí misma", y por eso, ha dicho, vota a la formación de Pablo Iglesias.
Ciudadanos, sin embargo, es "otra cosa", y lo ha comparado con las salidas a las crisis que se han dado en Francia de la mano de "un liderazgo emergente" como el de Emmanuel Macron, o en Alemania, donde hace poco se rubricó la reedición de la "gran coalición" entre democristianos y socialdemócratas. Para Mayor Oreja, un modelo mixto entre ambas soluciones es el que cree que se acabará adoptando en España.
En cuanto al PSOE, ha afirmado que "no se sabe dónde está", ya que mientras hay fuerzas en línea con ese "nuevo orden" que empuja hacia a un pacto con la formación "naranja", hay otras en la "línea populista". En ésta Mayor Oreja ha situado al secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, quien, en su opinión, ya trató un "frente popular" con Podemos y los nacionalistas.
Los nacionalismos, manifestación de la crisis moral
Del nacionalismo el exministro y exeurodiputado ha dicho que es la manifestación de la actual "crisis moral" de España.
Ha criticado que aquí se premie la diferencia en lugar del entendimiento entre distintos, y a la vez, ha defendido que las comunidades autónomas más ricas, como País Vasco y Cataluña, deberían preocuparse por las más pobres y hablar más de sus obligaciones con el Estado y no tanto de sus derechos.
Según ha recalcado Mayor, el movimiento nacionalista se mueve en "vanguardias": en primer lugar, ETA; posteriormente, el Plan Ibarretxe; y, actualmente, el Plan Puigdemont. En este sentido, ha recordado que ETA no está derrotada, pues lo que representa es más que una organización terrorista. Es "un proyecto político para romper España", ha asegurado. Así, ha alertado de que su próximo movimiento consiste en "hacer legal lo que hoy es ilegal", es decir, el llamado "derecho a decidir".
El exministro de los gobiernos de José María Aznar ha abogado por que los partidos constitucionalistas trabajen por encontrar espacios comunes, por ejemplo para que el español, "la segunda lengua más hablada del mundo", no sufra "maltrato" en algunas comunidades.