Artur Mas reconoció este martes como investigado por la causa contra el proceso separatista que, antes de la consulta ilegal del 9-N de 2014, la Generalidad abrió una negociación con el Gobierno central y la oposición. Habrían acudido un representante del Partido Popular nombrado por el presidente Mariano Rajoy, otro del PSOE que habría designado Alfredo Pérez Rubalcaba y un tercero del Ejecutivo autonómico. Fuentes consultadas apuntaban al popular Pedro Arriola y el socialista José Enrique Serrano como emisarios, según VOX, "para la posibilidad de un referéndum pactado".
El propio VOX, como partido que conduce la acusación popular en el Supremo, ha anunciado que pedirá al juez instructor Pablo Llarena la comparecencia como testigos en el Alto Tribunal, en forma presencial o por escrito, de Rajoy y Rubalcaba para que aclaren la presencia de representantes del PP y PSOE en las reuniones que señaló Artur Mas.