La llegada de un frente frío a la Península propiciará un cambio de tiempo muy brusco, con nevadas en cotas bajas de la mitad norte y un desplome generalizado de las temperaturas de entre 8 y 10 grados, según la información de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) de la que se hace eco Efe.
Hasta doce tramos de carreteras de la red principal se podrían ver afectados por acumulación de nieve a lo largo de este episodio, informa la Dirección General de Tráfico (DGT), entre ellas la AP-6, que ya se colapsó durante la nevada del primer fin de semana de enero.
"Se trata de un episodio invernal típico, en el que lo más destacado es que llega tras unos días con temperaturas muy cálidas", ha señalado a Efe Delia Gutiérrez, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Así, "el cambio será muy brusco", pero la borrasca y esta situación de frío y nieve "no se alargará en el tiempo y a partir del sábado la situación se volverá más anticiclónica", ha destacado la portavoz.
Las nevadas de este jueves no dejarán además una acumulación "especialmente importante", aunque para este viernes se prevé que continúen los avisos naranja (riesgo importante) en Asturias y en los Pirineos por fuertes nevadas que dejarán 20 centímetros de espesor en 24 horas.
Nieve a partir de 600 metros
La nieve afectará también a las montañas de Galicia, cordillera Cantábrica, Pirineos y Meseta norte, donde nevará a partir de 600 metros, y a las sierras de Cazorla, Alcaraz y Segura, donde la cota se situará a 800 metros.
También se notará en toda la Península, salvo en el litoral mediterráneo, un acusado descenso de las temperaturas diurnas, sobre todo en la zona centro, una caída de los termómetros de la que aún se librarán los archipiélagos.
Para mañana, viernes, la Aemet prevé que continúe el descenso generalizado de las temperaturas y la cota de nieve se sitúe entre los 800 y 1.000 metros, ocasionalmente entre los 600 y los 800 metros en el norte, en torno a 1.000 metros en las Baleares y entre 800 y 1.000 metros en el sureste.