El Punt-Avui, decano de la prensa de papel en catalán, ha presentado un ERE que afecta a ochenta trabajadores. El comité de empresa ha convocado huelga en plena campaña, desde hoy y hasta el 22 de diciembre. El expediente se atribuye a un efecto colateral de la aplicación del artículo 155. No se ejecutan las subvenciones acordadas por el gobierno cesado de Puigdemont y Junqueras ni tampoco las campañas institucionales de propaganda. El cierre del grifo del dinero público ha llevado a la dirección del diario a plantear un duro recorte de plantilla.
La empresa editora, que también dispone de un diario deportivo y una televisión para la que trabaja la esposa de Puigdemont, Marcela Topor, ha sido una de las grandes beneficiarias del proceso separatista, con subvenciones directas de casi un millón de euros al año e ingresos por publicidad institucional superiores a los dos millones.
También se resienten por el 155 los ingresos de Ara, otro diario nacionalista con unas ventas de diez mil ejemplares, superiores a las de El Punt-Avui, pero que le reportan ayudas algo menores. El año pasado recibió algo más de trescientos mil euros por el diario de papel y 180.000 por la web, propaganda de la Generalidad aparte.
Las editoras de La Vanguardia y El Periódico también han visto mermados sus ingresos publicitarios procedentes de la administración autonómica y negocian a dos bandas, con los altos cargos no cesados y con el Gobierno, para quedar excluidas de los efectos financieros del 155. El grupo Godó y el Grupo Zeta tienen comprometidos 1,4 millones de euros en subvenciones sobre un total de 7,3 millones retenidos por el Gobierno, según informa Crónica Global.
La prensa digital de orientación nacionalista también depende en gran medida de las ayudas de la Generalidad. El año pasado, media docena de publicaciones se repartieron un millón y medio de euros. En 2017, las ayudas ya cobradas han sido mayores, así como la contratación publicitaria administrativa. Sin embargo, el parón en los pagos debido a la intervención parcial de la Generalidad compromete su viabilidad a medio plazo.