En los dos años y medio que Ahora Madrid lleva gobernando la capital jamás se había presenciado públicamente un desencuentro tan tenso como el que estalló este miércoles en el Pleno municipal con su socio de gobierno, el PSOE, cuando éste presentó una proposición para que Manuela Carmena retirara las competencias a la concejal presidenta de los distritos de Usera y Arganzuela, Rommy Arce.
La edil de Ahora Madrid pertenece a la corriente anticapitalista de Podemos. Esta peruana afincada en Madrid era bibliotecaria en la Universidad Complutense, militante de CCOO y formaba parte la "Plataforma de Apoyo a Alfon" cuando se presentó a las primarias de la candidatura ciudadana que consiguió hacerse con la alcaldía de Madrid.
Los problemas con Arce vienen arrastrándose desde hace tiempo y ocasionan no pocos quebraderos de cabeza a la alcaldesa. Ha roto el voto de Ahora Madrid en el Pleno municipal en diversas ocasiones, la primera en noviembre de 2015, cuando se opuso al proyecto de los cooperativistas de Raimundo Fernández Villaverde. También es muy crítica con la Operación Chamartín que pretende llevar a cabo el gobierno al que pertenece y el pasado mes de junio votó en contra de la estimación del proyecto de los cooperativistas de Cuatro Caminos.
Asimismo se ha mostrado contraria a condenar los encarcelamientos políticos de Venezuela y muy activa con la cuestión de Cataluña: fue la que realizó la famosa cesión de un local municipal para que se desarrollara un acto en favor del referéndum ilegal, que finalmente el juez prohibió; ha calificado de presos políticos a los Jordis y se ha mostrado entusiasmada con la proclamación de la república catalana.
Sus desplantes a la oposición
Pero no sólo eso. En los plenos de distrito hace prevalecer su ideología radical e ignora a la oposición. Así lo denuncian PP, PSOE y Ciudadanos y fue lo que les llevó a plantarse en Arganzuela el pasado mes de julio. Y en septiembre los populares presentaron su reprobación en este mismo pleno, que los socialistas rechazaron para dar "tiempo para que mejorara su gestión y cambiara de actitud". Pero no lo ha hecho.
Así las cosas, el PSOE tomó esta decisión plasmada este miércoles y defendida por sus concejales Ignacio de Benito y Érika Rodríguez. A la petición de los socialistas se suma la queja de más de 200 vecinos que, "llevados por el hartazgo y la impotencia –explicó Benito– pidieron lo mismo que hoy le pide, en su nombre, el grupo socialista. Arganzuela y Usera no merecen el abandono institucional al que Rommy Arce ha condenado a ambos distritos".
Y es que, según denunció el PSOE, "de las 66 iniciativas presentadas por los socialistas y aprobadas en el pleno de Usera quedan pendientes 45, casi un 70% incumplidas". "No es mejor el balance presupuestario, que apenas roza el 70% de ejecución en 2016, una cifra que confirma la desidia, la desgana y la incapacidad" de esta edil para estar al frente de la junta municipal de este distrito madrileño.
"En Usera he visto llorar de rabia a representantes de entidades deportivas como Salva, de la asociación Curris. En Usera he visto a vecinas acudir al pleno mes tras mes denunciando los mismos problemas de suciedad y falta de mantenimiento. En Usera he visto cómo se pisoteaba el reglamento orgánico de los distritos", denunció Ignacio de Benito. Y en Arganzuela la situación no es mejor, según manifestó Rodríguez.
Rommy Arce arremete contra el PSOE
Arce se mostró muy molesta con el PSOE. Mucho. Le acusó de "deslealtad y juego sucio". "Mire, lo primero que tienen que aclarar es si quieren estar en el Gobierno o en la oposición", espetó. "Cuando este gobierno está siendo atacado por (el ministro de Hacienda, Cristóbal) Montoro y la derecha, ustedes se suman a la estrategia del PP".
Además, reprochó a los socialistas que pidan su destitución cuando en 25 años de oposición al PP no han pedido el cese de ningún concejal. "Vergüenza les tendría que dar". Según Arce, la "persecución contra los gobiernos del cambio" continuará en los próximos meses y que, al igual que les sucedió a Mauricio Valiente, Carlos Sánchez Mato y Celia Mayer, otros concejales tendrán que subir en el futuro al estrado para "defenderse de las reprobaciones y ceses que van llegando uno tras otro". "Se suman a esa estrategia de la derecha", insistió la edil al socio de investidura de Manuela Carmena. "Están jugando un juego muy peligroso, dejen de jugar esa política del barro y unámonos para luchar contra Montoro".
"Afectará a nuestras relaciones con AM"
La edil recibió los aplausos de la mayoría de su bancada cuando concluyó su discurso, algo que no gustó a los socialistas, que ya avisaron ayer a la alcaldesa: "Actuarán con contundencia" si no se produce ningún movimiento con respecto a esta concejal. "Si no hay ningún movimiento, afectará a nuestras relaciones con Ahora Madrid, especialmente en Arganzuela y Usera pero también en la política municipal", aseguró la portavoz del PSOE, Purificación Causapié.
Hasta ahora Manuela Carmena ha hecho caso omiso a todas las reprobaciones aprobadas por el Pleno. Y todo apunta a que actuará de la misma manera en esta ocasión. El jueves pasado, Inés Sabanés ya adelantó las intenciones del Gobierno local a este respecto. "La responsabilidad y competencia de los nombramientos corresponde al equipo de Gobierno, que es el que tiene facultad para adscribir o no a concejales a una función. Este equipo no va a tener en cuenta esta exigencia de retirada de competencias", dijo. Si es así, la pelota estará en el tejado del PSOE.