El Mundo dice que "Rajoy utiliza el trámite del 155 para dar otro plazo a Puigdemont". De momento, hasta el sábado, parece que el puente del Pilar se le hizo corto. Un purito cachondeo. Francisco Rosell le recuerda al presidente que su "deber" es "restaurar ya la legalidad en Cataluña y acabar con el peligroso clima de confusión que amenaza la convivencia, la ruptura de la integridad territorial y la estabilidad económica". En resumen, lo que juró defender cuando accedió a la Presidencia de España. "El Gobierno tiene que asumir de una vez que la Generalitat es ya un gobierno autonómico que se ha declarado en rebeldía" y "resulta fundamental que el presidente supere el vértigo que parece suponerle activar" el dichoso 155. Vamos, valiente, que tú puedes. "Es una exigencia inexcusable, clamorosa y urgente que el Estado restituya el marco constitucional en Cataluña". De una puñetera vez, le ha faltado añadir. Emilia Landaluce le da donde más le duele. En los votos. "Los españoles no verán con buenos ojos que el Gobierno accediera al chantaje de los delincuentes. Sánchez y Rajoy no están en una posición sencilla. Debe ser difícil tener que traicionar la confianza de esos españoles que se han vuelto a reencontrar". Y lo mismo se lo hacen pagar en las urnas, viene a decir.
El País dice que "el Gobierno y PSOE dudan sobre el alcance y el momento del 155". Incluso de la existencia del 155. Un editorial duro y claro da un puñetazo sobre la mesa. "La desconcertada y desconcertante reacción del Gobierno de Mariano Rajoy, mal asesorado en su alianza con el igualmente deconcertado y desconcertante Pedro Sánchez, ha acabado de redondear el entuerto" de la situación en Cataluña. "La sociedad española en su conjunto, no solo la catalana, antes irritada, está cayendo ahora en el abatimiento y la frustración. La larga crisis política en Cataluña, que ya está minando seriamente la reputación de nuestra democracia y todas las instituciones de nuestro sistema, amenaza con prolongare aún más. Están en juego valores, como el respeto a las reglas del juego democráticas; principios, como la lealtad constitucional; sentimientos, como los propios de una convivencia racional y no espasmódica, y bases materiales de una sociedad avanzada. Todo eso corre peligro. Ante la mirada vacilante de nuestros dos principales dirigentes políticos, que callan casi todo el tiempo para ocultar su incapacidad, el estado de derecho, el sistema democrático y hasta la economía de mercado están en entredicho". "El gobierno central parece pensar que con no visualizarse la declaración de independencia, todo está arreglado y nada es un problema". Que yo no quiero líos, oiga. Javier Ayuso acusa directamente al presidente del Gobierno de hacer "dejación de funciones" al retrasar "indefinidamente sus actuaciones fiándose de que los jueces, los policías, los periodistas, los empresarios, los demás partidos… y hasta el Rey le vayan abriendo el camino para una decisión que le da miedo tomar". Toma ya. Pero no acaba aquí. "Entre sus funciones está que se cumpla la ley y si Mariano Rajoy hubiera activado el artículo 155 el 8 de septiembre nos hubiéramos ahorrado muchos problemas". Menuda ensalada de tortas le ha caído a Rajoy en el único periódico que llega allende nuestras fronteras el mismo día que tiene que ir a Bruselas.
La portada de ABC habla por sí misma. Una foto de Rajoy escondido tras un folio en el que se lee: "Rajoy ofrece amnistía a cambio de elecciones legales". Miedica, miedica... Y es que a Bieito Rubido esto le parece una sandez, una forma del presidente de sacudirse la responsabilidad de tomar decisiones. "De nada serviría convocar comicios y tener un nuevo gobierno catalán que dejase en suspenso el chantaje al Estado para reactivarlo cuando le venga en gana (...) Sin una rectificación tajante, el artículo 155 y el Código penal son las únicas alternativas fiables contra los delincuentes que han puesto al Estado en jaque". De amnistía ni hablar, majete.
La Razón dice (y acierta) que "Rajoy no aprobará hoy la aplicación del articulo 155" mientras que "Puigdemont planea declarar la DUI y elecciones". En esto segundo la ha pifiado. Ni palabra de elecciones. Marhuenda parece hoy Albert Rivera pidiendo elecciones en su editorial. "Esa sería la manera para salir, de momento, de una crisis que puede llevarnos a un bloqueo institucional sin precedentes (…) La convocatoria de elecciones es la mejor salida en términos democráticos". Pero Marhu, alma de cántaro, en Cataluña ya no existe ninguna democracia, hay una dictadura separatista dirigida por chalados como Junqueras que dice que las empresas se han ido por las cargas policiales del 1-O y se queda tan ancho. Por cierto que hay muchos comentarios sobre el numerito de Podemos con sus socios del partido corrupto de los Pujol con los cartelitos en el Congreso dándolo todo por los Jordis. Ni ERC se sumó. Bien, Pablo, los estás haciendo muy bien.
La Vanguardia nos adelanta la nueva amenaza de Puigdemont. "Puigdemont avisa que dará por buena la DUI si se aplica el 155". El editorial de hoy rebaja el tono chantajista de otros días y se ve a Godó como asustado. Dice que el independentismo, al que con tanto entusiasmo ha contribuido este periódico, no ve los "peligros" de "violentos episodios de enfrentamiento civil". "No debe darse –opinan– un paso atrás, porque el logro de la independencia es un fin superior en cuyo altar deben realizarse todo tipo de sacrificios. Incluidos el de la convivencia. Y quien sabe si el de algunas vidas". Enfrentamiento civil, muertos. ¿No pensó en ello el conde de Godó cuando creó Juntos por el Sí para lograr una mayoría independentista en el Parlament? Pues a apechugar.