Parecía que, tras las presiones de Ferraz, la presidenta andaluza iba a seguir el camino que el PSOE de Ceuta abrió el pasado lunes, día 25. Se trataba de apoyar la moción impulsada por Albert Rivera y no suscrita por Pedro Sánchez en el Congreso, añadiendo unas enmiendas "suavizantes" a su texto. La principal de ellas era una llamada al "diálogo", que el PSOE andaluz no ha querido recoger.
Pero Susana Díaz, cuenta ABC, ha dejado pasar el plazo de presentación de enmiendas sin usar su opción de modificar la declaración de Ciudadanos, si bien es posible presentar enmiendas de voz en el propio Pleno del Parlamento andaluz, algo que no es demasiado frecuente. Susana Diaz reiteró este martes en Lisboa su inequívoca posición de apoyo al Estado de derecho en Cataluña, pero nadie sabe qué va a hacer el PSOE andaluz.
Si es cierto que Susana Díaz sufre la presión del PSOE nacional, no es menos cierto que padece una presión muy importante en el seno del Parlamento andaluz. De hecho, el PSOE andaluz gobierna Andalucía gracias a la muy oportuna ayuda de Ciudadanos que practica una oposición sin vaivenes ni crispación.
Según El Mundo, Susana Díaz va a ignorar la orden de Pedro Sánchez de consensuar, en última instancia, la postura a adoptar ante la declaración de apoyo al gobierno de Ciudadanos. Se deduce tal decisión del hecho de haber presentado varias enmiendas al margen de los criterios de Ferraz, aunque al final no haya formalizado ninguna por escrito.
En las enmiendas barajadas se apoyaba y reconocía a los ciudadanos de Cataluña, especialmente a los andaluces, se reconocía la entereza de los alcaldes y concejales que respetan la legalidad y se valoraba el papel que las Comunidades Autónomas tienen en la defensa de los derechos y libertades constitucionales.
Sin embargo, Susana Díaz no ha considerado siquiera la indicación del sevillano Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, el hombre clave de Pedro Sánchez en Andalucía y alto cargo del PSOE nacional, de incluir en las enmiendas una que apelara a "buscar una salida pactada y legal para la convivencia de todas las sensibilidades de nuestro país", impulsada ya en Ceuta por el PSOE.