Viernes noche, terraza de un hotel de gran lujo de Barcelona. Los catorce altos cargos de la Generalidad detenidos el miércoles por varios supuestos delitos relacionados con la organización del referéndum ya han sido puestos en libertad después de tres días de intensas movilizaciones. El teniente de alcalde de Barcelona Jaume Asens, el exdiputado de la CUP y portavoz de Súmate (la sección para hispanohablantes de ERC) Antonio Baños y el excomisario de los fastos del tricentenario de 1714 y director del programa Polonia de TV3 Antoni Soler reponen fuerzas en torno a una mesa en la que se acumulan los cócteles.
Los tres han denunciado a través de sus cuentas en las redes sociales la "brutal represión" de Estado, han hecho llamadas a la movilización callejera y han apuntado a Joan Manuel Serrat como botifler (traidor) por dudar de las garantías legales del referéndum. La página web Dolçacatalunya retrata a los tres notables de la política y los medios en Cataluña a través de sus "trinos" de las últimas y tensas horas, en las que una secretaria judicial ha tenido que escapar por una azotea y varios agentes de la Guardia Civil estuvieron a punto de ser linchados en la consejería de Economía. Sucedió un día antes a pocos metros del lujoso hotel, Casa Fuster, en el que Asens, Baños y Soler se recuperan de la opresión del Estado, se burla el presidente del PP catalán, Xavier García Albiol, en su cuenta de Twitter.
.@antoniobanos_ líder CUP después de manifestarse frente TSJC x la opresión de España, en un hotel 5*GL reponiendo fuerzas revolucionarias pic.twitter.com/U7ts3X2mvZ
— Xavier García Albiol (@Albiol_XG) September 23, 2017
Las encendidas soflamas, la denuncia sobre la suspensión de los derechos civiles, la lucha en primera línea no es incompatible con el ocio nocturno en uno de los puntos más selectos y distinguidos de la noche barcelonesa. A las diez de la noche se registran caceroladas. Unos aporrean sartenes y otros hacen tintinear los hielos de su copa en señal de protesta.