El PSOE-A celebrará a finales de julio su congreso regional y debe abrir de manera inmediata el plazo para la presentación de las precandidaturas a la secretaría general que en este momento está en manos de Susana Díaz.
Ya es conocido que Susana Díaz optará a la reelección pero desde este lunes y hasta el martes a las 12:00 horas, cualquier militante puede presentar su precandidatura. De momento, nadie lo ha hecho y por ahora, el sector sanchista, que agrupa hasta ahora alrededor del 30 por ciento de la militancia socialista andaluza según los resultados de las primarias nacionales, no va a impulsar que alguien de su sector lo haga.
Teniendo en cuenta que para optar a la precandidatura los interesados tienen que presentar poco menos de 5.000 avales, un 10 por ciento del censo electoral, es evidente que los sanchistas andaluzas podrían, si quisieran, propiciar la presentación de un candidato afín que tendría que cosechar sus avales desde el día 21 de junio al 1 de julio. De ser así, habría primarias y votación el día 16 de julio.
El precedente del congreso nacional del PSOE, que ha consagrado el poder de Pedro Sánchez, no augura un buen clima para el congreso andaluz. Al desplante de Sánchez de recibir durante unos exiguos ocho minutos a Díaz, haberlo hecho al final de la jornada congresual y no haber contado con ningún socialista andaluz afín a la presidenta de la Junta en su Ejecutiva, no favorecen buenos pronósticos.
Por su parte, la situación del asiento de Susana Díaz en el Palacio de Congresos –en el gallinero-, su ausencia de la clausura y la abstención de una mayoría del PSOE andaluz en las votaciones políticas, tampoco permiten profetizar un congreso andaluz sin tensiones. Ronda la hipótesis del ojo por ojo: ningún sanchista en la Ejecutiva andaluza y alto porcentaje de abstenciones o votos en contra de las resoluciones del congreso y de la proclamación de Susana Díaz.
Los andaluces de la Ejecutiva y el Comité Federal
Ocho socialistas andaluces aparecen en el máximo órgano de dirección del PSOE nacional y ninguno de ellos pertenece a la órbita de Susana Díaz. El principal de ellos, como ya adelantó Libertad Digital, será Alfonso Rodríguez Gómez de Celis como secretario de Política Institucional y Administración Pública.
Le acompañan en la Ejecutiva la cordobesa Carmen Calvo, exministra en el Gobierno Zapatero, en Igualdad; la onubense María Luisa Faneca, en la Secretaría de Pesca; el sevillano Francisco Salazar, en la Secretaría de Acción Electoral; la gaditana María Jesús Castro – que logró el apoyo de la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, a la causa de Sánchez -, estará en Mayores; el malagueño Ignacio López, en Movimientos Sociales; el alcalde de Jun (Granada), José Antonio Rodríguez, caracterizado por su insistente presencia en las redes sociales -, en Dinamización Social y el exalcalde de Almería Fernando Martínez, en Memoria Histórica. Jaén, bastión esencial de Susana Díaz junto a Sevilla, ha quedado sin representación.
En el Comité Federal, el órgano que defenestró a Pedro Sánchez, que estaba encabezado hasta el momento por Verónica Pérez, una pretoriana de Susana Díaz que presumió de ser la máxima autoridad del PSOE en aquella crisis, ha cambiado de manos. Ahora, será el alcalde de Dos Hermanas (Sevilla), Francisco Toscano, uno de los más fieles apoyos de Pedro Sánchez en Andalucía y enemigo radical de Susana Díaz, el que lo presida.