La ola de calor, que ha batido récords en varios puntos de la península, comenzará a remitir mañana con el descenso de las temperaturas, aunque éstas seguirán siendo altas y mantendrá la alerta en al menos 23 provincias de diez comunidades, según el pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
La ola de calor parece ser la causante de la muerte de dos personas, ayer un hombre en Extremadura y hoy un ciclista en Cataluña, que podrían haber fallecido por un golpe de calor causado por las altas temperaturas que afectan desde el jueves a la península y que ayer tuvieron su punto más álgido.
Solo en Cataluña, las autoridades sanitarias han atendido estos días 147 casos por las altas temperaturas, según informó hoy el Sistema de Emergencias Médicas de Cataluña (SEM).
Ayer sábado, la jornada más intensa de calor, las temperaturas batieron varios récords de temperatura máxima para el mes de junio en varios observatorios de la Aemet: el madrileño Parque del Retiro registró 40,3 grados –la más alta desde que se tiene registro (1920)– igual que Ponferrada, con 39,2 (registro desde 1951).
Las temperaturas mínimas también batieron su récord para el mes de junio en Cádiz, que sufrió la noche más calurosa de su historia en este mes con 26,5 grados (registro desde 1955) y Tarifa con 22,4 (registro desde 1945).
La primera ola de calor del año ha llegado muy temprano, cuando todavía es oficialmente primavera, y aunque dará un respiro desde mañana, la Aemet apunta a que las temperaturas seguirán siendo demasiado altas para esta época del año.
Las jornadas de sofocante calor irán desapareciendo poco a poco y, mañana, solo tres provincias superarán los 40 grados. Pese al descenso del mercurio, la Aemet mantendrá mañana el nivel de alerta en 23 provincias de diez comunidades –frente a las 34 de hoy–, la mayor parte de nivel amarillo (riesgo), excepto tres de nivel naranja (riesgo importante).
Estas últimas serán Córdoba, Sevilla y Badajoz, las únicas de toda España cuyos termómetros alcanzarán o superarán los 40 grados.
Las temperaturas bajarán mañana de forma generalizada hasta los 37/39 grados en la mayor parte del interior de península, aunque subirán el litoral cantábrico, donde hasta ahora la ola de calor no se había notado tanto, con un cambio de tendencia que, en el caso de Bilbao, prevé una temperatura máxima de 37 grados.
Está previsto que las temperaturas nocturnas también asciendan de forma notable en País Vasco, Navarra y alto Ebro.
Las regiones que se mantendrán con máximas de 38 son Orense, Huelva y Toledo, y, con uno menos (37) se sitúan Salamanca, Valladolid, Zamora, Madrid, Lugo, Zaragoza, Ávila y La Rioja.
Frente a los cielos despejados del interior de la península en las últimas jornadas, a lo largo del día de mañana se irán formando nubosidad de evolución en gran parte del interior peninsular, que podría dejar chubascos y tormentas dispersos y ocasionales, principalmente por la tarde.
También se registrarán intervalos de nubes bajas en el norte de Canarias y, al principio, en el litoral gallego y catalán, área del Estrecho, Baleares y Melilla.
Soplará un viento de componente este en el área mediterránea y resto del litoral andaluz, con un levante fuerte en el Estrecho que tiene en alerta amarilla a Cádiz.
El martes, las temperaturas subirán en el área mediterránea peninsular, norte de Galicia y Asturias, y descenderán en País Vasco, Navarra y el noroeste de la península.