Los datos del escrutinio han respondido a quienes daban por segura una cómoda victoria de Susana Díaz en las primarias socialistas. La presidenta andaluza ha sido derrotada por el ex secretario general y, además, el resultado no ha sido tan ajustado como auguraban algunos. Sánchez le ha sacado diez puntos, un 50% frente a un 40%.
Hay otros datos que explican la magnitud de la derrota de Díaz:
Más votos que con Madina: Pedro Sánchez se enfrentó en 2014 a las primarias del PSOE con Eduardo Madina. En aquella ocasión, cuando era el preferido de Susana Díaz y otros barones, también ganó, y lo hizo con 62.477 votos, un 48,6% de los sufragios. En esta ocasión, con el aparato en contra, Sánchez ha vuelto a ganar y lo ha hecho de forma más abultada: más de 67.000 votos con el recuento sin completar, lo que supone un 50%.
Ganó en avales, perdió las primarias: muchos vieron en la presentación de los avales una especie de primera ronda de las primarias. Entonces, Susana Díaz presentó 6.000 avales más que Sánchez, lo que se interpretó como la posibilidad de un resultado muy reñido. A la luz de los datos de este domingo, muchos de esos avales no se tradujeron en votos: por ejemplo, logró ser la más avalada en Castilla-La Mancha y Madrid, pero en ambas regiones ha ganado finalmente Sánchez. Y en Andalucía, logró unos 2.000 votos menos que los avales obtenidos, mientras que Sánchez consiguió mejorar sus 8.818 avales hasta los 12.274 votos.
Algunas grandes derrotas regionales: Susana Díaz sólo logró 860 votos en Cataluña frente a Pedro Sánchez, que obtuvo más de 6.200 y más del 80%. Peor fue el resultado en el País Vasco, donde ganó Patxi López: 294. Sólo obtuvo una victoria clara en Andalucía, con el 64% frente al 30%. En Aragón el resultado estuvo ajustadísimo. El resto fueron para Sánchez.