El director de La Razón ha hablado en Es la Tarde de Dieter, de esRadio, un día después de su declaración como imputado en la Operación Lezo por supuestas presiones a Cristina Cifuentes. En el programa, Francisco Marhuenda ha vuelto a negarlo: "Nunca la hemos coaccionado, no sé cómo alguien pueda pensar que yo coaccione a alguien a quien tengo afecto personal". Después, ha retado a que le envíen noticias o comentarios suyos contra la presidenta regional: "Es que está ahí, todo".
Sobre si fue él el coaccionado, en alusión al presidente de La Razón, el también imputado Mauricio Casals, Marhuenda ha relatado que Mauricio le pidió atender a Edmundo Rodríguez Sobrino –el consejero delegado de La Razón detenido en la operación por sus negocios en Iberoamérica– pero no hacer "nada de lo que te pida". "Di que sí, que sí y ya", ha dicho Marhuenda que le indicó el directivo.
El director de La Razón ha explicado que no ha hablado con Cifuentes, "ni debo hablar". Ha insistido en que no tiene "conciencia" de haberla presionado o criticado: "La única discrepancia que hemos tenido es el tema de las primarias".
También ha recalcado que Cifuentes no es ni influenciable ni asustadiza y ha dicho que el asunto le parece "de broma". Sí ha reiterado sus disculpas por tachar de "zorra" a su jefa de gabinete.
Sobre Edmundo Rodríguez Sobrino, que habría pedido esa campaña contra Cifuentes para que no destapara el caso del Canal, Marhuenda ha dicho que "estaba obsesionado" con el Canal y con las noticias en su contra.
Preguntado sobre si se arrepiente de las grabaciones que le han llevado hasta el juez, Marhuenda ha dicho que eso es de "gente frívola" y que no se arrepiente de nada. Confía en que todo se aclare pronto. "Estoy muy tranquilo", ha reiterado.