El Congreso zanja la polémica con Cañamero con una amonestación verbal

La Mesa del Congreso ha decidido zanjar la polémica provocada por el diputado de Podemos Diego Cañamero con una "amonestación verbal" de la presidenta de la Cámara Baja, Ana Pastor. El pasado 22 de marzo, el jornalero "intimidó" al ministro Rafael Catalá y exhibió dos carteles minutos antes de que comenzara la sesión plenaria. En uno de ellos, se podía ver a Iñaki Urdangarín con el lema "libre en Suiza", y en el otro, al que fuera candidato de Podemos por Jaén al Congreso, Andrés Bódalo, encarcelado hace un año por agresión.

Esta acción desató la polémica de las formas en el Congreso y este martes la Mesa ha zanjado este asunto aprobando, con la única oposición de los dos miembros de Unidos Podemos, que la presidenta de la Cámara amoneste verbalmente al diputado morado. Así que Ana Pastor se reunirá en breve con Cañamero para trasladarle esta decisión. Por ahora, esta "llamada de atención" no se hará extensible a otros miembros de Podemos.

Apoyo a Cañamero

Tras conocerse esta noticia, Diego Cañamero ha asegurado en los pasillos del Congreso que "no cree" que Ana Pastor vaya a llamarle para amonestarle y que su gesto no fue "una ofensa, ni acoso, ni nada". "No creo que me llame por eso. En ningún momento yo creo que fue ninguna ofensa simplemente enseñar dos carteles diciendo que uno está en libertad y otro está en la cárcel. Me parece que eso no es ninguna ofensa ni es acoso ni nada", ha dicho.

"En todo caso acosar es lo que hace el Gobierno con los fiscales o lo que hace el Gobierno con los pensionistas o con los que no tengan vivienda", ha proseguido y ha añadido que seguirá haciendo en el Congreso "cualquier cosa que esté dentro de la normalidad democrática". "Es decir, que si hay que hacer alguna cosa en favor de los trabajadores, de los ciudadanos, de la libertad, de la democracia o de los derechos humanos, yo siempre estoy dispuesto a hacer cualquier cosa", ha advertido.

Desde su grupo parlamentario le apoyan. Irene Montero ha criticado la amonestación a Cañamero y ha asegurado que quien ataca el "decoro parlamentario" es el Gobierno, a quien le havcen preguntas en la sesión de control y "no responde ni una". "Es una tomadura de pelo", ha asegurado.

"Los partidos que llevan demasiado tiempo sin escuchar a los ciudadanos estaban acostumbrados a que no se escuchasen las verdades en el Parlamento", ha destacado Montero, que coincide con Cañamero en que hay una justicia "para ricos" y otra para "pobres".