El pasado lunes, Unidos Podemos pidió a la Mesa del Senado la prohibición de la venta de Coca Cola en toda la Cámara Alta. Ahora, los representantes del partido morado y sus confluencias llevan esta reivindicación también al Congreso de los Diputados.
El grupo parlamentario de Pablo Iglesias ha dirigido un escrito a la Mesa de la Cámara Baja para pedir formalmente que no se vendan productos de Coca-Cola en toda la institución hasta que cumpla "la sentencia declaró nulo su Expediente de Regulación de Empleo de (ERE) de 2014".
El texto está firmado por los diputados Aina Vidal y Xavier Domènech, ambos de la confluencia catalana de En Comú. En él, solicitan a la Mesa del Congreso "que inste a Eurest, empresa adjudicataria del servicio de restauración Congreso de los Diputados, a que no sirva ningún producto comercializado por la empresa Coca-Cola Iberian Partnets hasta que ésta no cumpla, tal como le mandatan tanto la Audiencia Nacional como el Tribunal Supremo, las sentencias que declaran nulo el ERE presentado en enero de 2014 y que supuso el despido de 1800 personas".
Primero, en el Senado
Petición que llega después de que el pasado lunes, dos representantes de la confluencia en la Cámara Alta, Iñaki Bernal, de Izquierda Unida, y Vanessa Angustia, de En Marea, hicieran esta petición en el Senado para que prohibiera su venta en "solidaridad" con los trabajadores de la planta de Fuenlabrada.
El boicot a Coca-Cola es uno de los caballos de batalla de Podemos en los últimos meses. En una manifestación el pasado diciembre, Pablo Iglesias afirmó que "hay que seguir sin beber Coca-Cola porque Coca-Cola está atacando los derechos de los trabajadores".
Poco después, el secretario general del partido morado encontró respuesta a los ataques contra esta bebida en el director de marketing mundial de la marca que contestó a estas palabras en Twitter. El directivo advirtió al líder de Podemos en tono de mofa que, si seguía haciendo campaña contra Coca-Cola, él daría su apoyo a Íñigo Errejón.