Como era previsible, Podemos acaparó la atención en la visita del presidente de la República Argentina, Mauricio Macri, al Congreso de los diputados. La primera señal de lo que iba a ocurrir la dio la portavoz del grupo parlamentario, Irene Montero, que este miércoles acudió a la sesión de control al gobierno con una camiseta en favor de la diputada argentina en prisión por múltiples delitos, Milagro Sala. En la camiseta se podía leer "Libertad Milagro". Atuendo, por cierto, que llevó también durante el saludo oficial de los portavoces del gobierno a la delegación argentina.
Tras los saludos a las autoridades, Mauricio Macri dio un discurso en el hemiciclo frente a diputados y senadores. El presidente argentino habló de la larga historia de afecto entre su país y España. Al tiempo, destacó los puntos en común entre ambos países tanto culturales como económicos. Por último, apostó porque en el futuro ambos países trabajen juntos. "Tenemos que entender y ratificar que juntos vamos a encontrar mejores posibilidades".
Un discurso que no aplaudieron todos los presentes. Los diputados de Podemos se negaron a aplaudir aunque, eso sí, se pusieron en pie. Mientras, el resto de la sala dio una gran ovación a Mauricio Macri. A este gesto hay que añadir que dos representantes de la formación morada hicieron entrega al presidente argentino de un dossier que "incluye peticiones de diversas organizaciones de defensa de los derechos humanos" sobre el caso de la diputada argentina, violenta, mafiosa y corrupta, Milagro Sala, en prisión desde 2016.
Además, desde Podemos rechazaron la invitación a la cena que los reyes ofrecen en el Palacio Real este miércoles en honor a Macri. Para el partido de Pablo Iglesias el mandatario argentino "es un presidente off shore" al que no es necesario hacerle estos "actos de homenaje".