Pablo Iglesias y Alberto Garzón dan los últimos pasos para acabar con Izquierda Unida de manera definitiva. "Queremos superar IU", ha asegurado este lunes el coordinador general de la formación de izquierdas que ha defendido la creación de un bloque junto a Podemos y movimientos sociales.
Algo que, ha asegurado, "no se va a conseguir con el registro de un partido en el Ministerio de Interior, sino en la práctica. Esa construcción está en estado embrionario", ha añadido aunque después ha asegurado que su "objetivo político es construir algo más lo antes posible". Hace unos días El Confidencial daba a conocer que desde el partido morado ya se había llevado a cabo el registro del partido "Unidos Podemos".
Por su parte, Pablo Iglesias, ha asegurado este lunes que esa confluencia "no es algo que se tenga que construir siempre por arriba. Se tiene que construir por abajo, respetando la independencia de todas las organizaciones. Podemos no es lo mismo que IU, ni que Equo… pero creo que es importante consolidar un espacio político amplio y plural, no tanto por arriba sino en el encuentro de las bases y de los militantes en los movimientos sociales y en la sociedad civil".
Iglesias ha explicado que los líderes de ambos partidos tienen que participar juntos en diversas concentraciones: "Básicamente para que las bases se vayan acostumbrando a que podemos construir espacios de convivencia, que permitan convivir a nuestras diferencias y particularidades, pero en las que podamos conocernos, convivir y abrazarnos en la práctica del conflicto, la movilización y en el trabajo en la sociedad civil". Eso sí ha dejado claro que en esta unión a Podemos le toca "la difícil tarea de liderar porque somos la fuerza mayor".
Un asunto que se tratará en Vistalegre II
En esta misma línea, el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, ha confirmado que las dos formaciones buscan "fortalecer" la alianza. La fusión de ambas será uno de los asuntos que se debatirán en la próxima Asamblea de Vistalegre II que tendrá lugar a principios del año que viene. Allí se analizará la "estructura concreta" que le quieren dar a esta unión.
Eso sí, a diferencia de Garzón, a Echenique no le corre tanta prisa. "Creo que ahora no tenemos prisa", ha asegurado. "Un diseño precipitado puede ser nocivo para la organización". "Aunque tenga todo el sentido mundo avanzar a un espacio de política común eso no se hace en cuatro meses", ha señalado.
No todos están de acuerdo
Pablo Iglesias y Alberto Garzón se han mostrado en numerosas ocasiones dispuestos a que su alianza transcienda del ámbito parlamentario. Pero no sucede lo mismo en otros ámbitos de sus partidos.
Cargos históricos de IU como Gaspar Llamazares creen que este paso pone peligro la "identidad" de su formación. Desde el sector crítico del partido ya han advertido de que esta unión es la disolución de IU.
Por su parte, en la formación morada, Errejón y los suyos reivindican la necesidad de que Podemos siga siendo una fuerza "independiente", manteniendo la alianza electoral con IU pero sin llegar a fusionarse
Y otra de las piedras que esta unión se puede encontrar en el camino es la deuda que arrastra IU, de unos ocho millones de euros. Desde el partido de Alberto Garzón ya están intentando reducirla con la venta de algunas de sus sedes y locales.