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El Constitucional rehabilita a Francisco Serrano, el juez del 'niño cofrade'

El juez quedó inhabilitado por ampliar un día y medio la permanencia de un menor con su padre en el divorcio.

El juez quedó inhabilitado por ampliar un día y medio la permanencia de un menor con su padre en el divorcio.
Juez Francisco Serrano | Archivo

Francisco Serrano vuelve a ser juez. Han transcurrido seis años desde que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía le quitase su toga a través de una resolución cuanto menos polémica. Fue condenado por prevaricación dolosa en una sentencia que ni siquiera argumentaba el supuesto acto prevaricador. A priori, su delito fue modificar desde su Juzgado de Familia el turno de custodia de un niño de once años que había establecido anteriormente un Juzgado de Violencia sobre la mujer.

Éste último impuso un reparto que incluyó, por ejemplo, que "ambos progenitores respetarán el deseo de los hijos de tomar parte en las estaciones de penitencia de las hermandades a las que pertenecen". Fue exactamente lo que ocurrió: Serrano amplió un día y medio la permanencia del menor con su padre para que pudiera salir como paje en una hermandad de la Madrugada sevillana. La madre denunció el caso tras el cambio, que fue solicitado por el abuelo paterno aduciendo que la participación del niño en la procesión era "sumamente importante y trascendente".

El Tribunal Constitucional ha puesto fin al castigo del juez Serrano. Ha anulado la condena que el Supremo le impuso en segunda instancia por el denominado caso del niño cofrade. Con tres votos favorables y dos particulares, han dejado sin efecto el acuerdo del Alto Tribunal, que había incrementado la pena en ocho años también con tres votos a favor y dos en contra.

Se da la circunstancia de que Francisco Serrano se ha integrado como miembro del partido político Vox. Muchos de sus compañeros de judicatura criticaron la resolución que le condenó porque no citaba una sola infracción y despreciaba el interés del menor. Quien recuperará en los próximos días su condición de juez, adoptó las medidas de urgencia en la forma que establece la ley y siempre después de escuchar al menor y valorar su testimonio. Según hizo constar en su auto, el pequeño le dijo que "se encuentra en una situación de angustia que no entiende porque una cosa que más ilusión le hace en la vida es salir en la procesión de la Madrugá del Viernes Santo en la Hermandad del Silencio, pero que el abogado de su madre le han mandado un escrito al padre poniéndole todo tipo de problemas para salir en la procesión".

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