Como desde hace ya hace cinco años, miles de personas se han manifestado esta mañana por el paseo de Gracia de Barcelona y han participado en una concentración que ha llenado la plaza de Cataluña.En esta ocasión, tanto los partidos políticos como Sociedad Civil Catalana (SCC) se han desmarcado de la iniciativa, tomada por una veintena de entidades capitaneadas por el Movimiento Cívico d'Espanya i Catalans. Aún así, la asistencia ha sido superior a la esperada y tan colorida como en ediciones anteriores, con miles de banderas de España y senyeras y una enseña gigante que unía a ambas.
"España en el corazón" era el lema de la convocatoria, en la que se dejaron ver a título personal Xavier García Albiol y el presidente del grupo municipal del PP en Barcelona Alberto Fernández, así como algunos cargos locales de Ciudadanos. García Albiol aprovechó para censurar ante los medios el desacato del Ayuntamiento de Badalona y acusar al PSC de permitir que en Badalona gobiernen los antisistema pese a ser la del PP la lista más votada.
Las críticas a la política informativa de la Generalidad y a los planes separatistas de Puigdemont marcaron las intervenciones desde el atril en la plaza de Cataluña. Clemente Polo, presidente del Movimiento Cívico d'Espanya i Catalans calificó la hoja de ruta de tentativa golpista y acusó a la "pseudoizquierda xenófoba" de facilitar el proceso de ruptura del presidente de la Generalidad.
Según la organización, en torno a unas treinta mil personas participaron en la celebración, de carácter marcadamente festivo y que concluyó con una muestra de folklore boliviano. Los medios separatistas rebajaban la cifra de asistentes a 2.000., mientras que el Ayuntamiento cifró la asistencia en 5.000 personas.
Acto aplazado
El próximo domingo se llevará a cabo otra fiesta del Doce de Octubre, esta vez a cargo de Sociedad Civil Catalana y en el parque de Can Dragó, en el distrito de Nou Barris. Se tenía que haber llevado a cabo hoy pero la amenaza de lluvia aconsejó a los organizadores trasladar de día el acto.
Por otra parte y como ya es tradición, en los aledaños de la plaza de España se han dado cita las organizaciones de extrema derecha, que han reunido a unas doscientas personas. Han quemado una estelada. A pocos centenares de metros, un grupo autodenominado antifascista y compuesto también por unas doscientas personas se ha manifestado en contra. Una nutrida presencia policial evitó el contacto.