La presidenta del Comité Federal no ha querido esperar más y se ha marchado de la sede socialista sin haber sido recibida por la dirección federal del PSOE tras dos horas de espera en el hall de la planta baja y tras habérsele negado acceder a su despacho de la cuarta planta. "Mucha tristeza porque no entiendo cómo se puede interpretar que somos una amenaza para algo, porque no nos dejan acceder a las dependencias de Ferraz", dijo Pérez.
La presidenta, que considera ser la que ahora mismo lleva las riendas del proceso, tras la 'disolución' de la Ejecutiva, ha explicado que "yo he venido a instar que se convoque una Comisión Federal de Garantías y Ética para hacer un informe que arroje luz al procedimiento". Pero tras "estas dos horas sin que nadie me dé una respuesta a nada, porque he solicitado información y documentación para ejercer mi trabajo como presidenta del Comité Federal, he obtenido el silencio por respuesta".
Una espera en la que ha solicitado reunirse con alguien de la Secretaría de Organización "para que me faciliten toda la documentación como presidenta y me han dicho que en un rato me respondían". Pero al no obtener ninguna respuesta, Verónica Pérez ha optado por marcharse.
"Entenderán que no me voy a quedar mas tiempo esperando en el hall. Este es mi partido y lo quiero, y voy a ejercer mi responsabilidad. Lo voy a hacer, pero ahora mismo lo que procede es hacerlo con todas las garantías jurídicas y con toda la seriedad que merece un partido como el PSOE con 136 años de historia". Y ha añadido que esta situación "lo que demuestra es que es más necesario que nunca un informe de la Comisión de Garantías del PSOE. Espero que la presidenta del órgano lo convoque a lo largo del día de hoy porque es más necesario que nunca", ha dicho tras haber acusado previamente a la pedrista Isabel Celaá de "secuestrar" al citado órgano federal.