La Fiscalía presenta otra denuncia contra el rapero Pablo Hasel
El juez de la Mata estudiará la apertura de una nueva investigación por insultar al Rey y alabar a los GRAPO.
Políticos, banqueros, deportistas, toreros, ricos y hasta usuarios de Pokemon Go. En definitiva, todo aquel que no comparta posición ideológica con Pablo Hasel se convierte en objeto de sus insultos. La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha interpuesto una denuncia, otra más, contra el autor de repugnancias como "No me da pena tu tiro en la nuca, pepero", "que alguien clave un piolet en la cabeza de José Bono", "¡merece que explote el coche de Patxi López!", "es un error no escuchar lo que canto, como Terra Lliure dejando vivo a Losantos" o "pienso en balas que nucas de jueces nazis alcancen".
Lo cierto es que este autor de música rap debe la mayor parte de su notoriedad a las barbaridades que dice y escribe, mucho más que a la calidad de su producto. Se la debe, principalmente, a su condena a dos años de cárcel por enaltecimiento del terrorismo que dictó la propia Audiencia Nacional. El problema es que tampoco desde entonces ha puesto límites a la libertad de expresión, ni ha optado por la crítica en vez de la agresión verbal. Basta para ello darse una vuelta por sus perfiles en redes sociales o escuchar el tema que encabeza su canal de Youtube, con un llamamiento a prender “fuego al Estado fascista”.
La denuncia de la Fiscalía ha correspondido por reparto al juez José de la Mata, de perfil progresista. Estudiará al cantante por difundir en Twitter comentarios contra el Rey y las Fuerzas de Seguridad del Estado. También por alabar a miembros del Grupo de Resistencia Antifascista Primero de Octubre GRAPO, la organización terrorista que durante los años setenta y ochenta perpetró 84 asesinatos y 3 secuestros en España. En los citados mensajes, Pablo Hasel califica al monarca como "ladrón", acusa a la policía de "golpear y torturar" y califica las cárceles como "centros de exterminio". Entiende la Fiscalía que su perfil con 55.700 seguidores "es muy activo", llegando a generar 200 mensajes diarios.
La representación del Ministerio Fiscal en la Audiencia Nacional, dirigida por Javier Zaragoza, ha obtenido temprana respuesta del autor. Una réplica a su manera.
Y no es ni la primera ni la segunda vez que Hasel lidia con una denuncia por sus continuas faltas de respeto. El alcalde de Lérida, Ángel Ros, le acusó de amenazarle de muerte en otra de sus canciones, un procedimiento en el que la Fiscalía solicita una pena de un año y tres meses de cárcel. Según establece la denuncia, la letra dice que Ros "merece también un navajazo en el abdomen y colgarlo en una plaza" y "que le metan una bomba, que revienten sus sesos y que sus cenizas las pongan en la puerta de la Paeria".
Al frente de los ocho individuos, Pablo Hasel mantuvo el pasado mayo en jaque a la Universidad de Lérida. Se encerró junto a unas veinte personas en el rectorado de dicho centro emitiendo mensajes a través de las redes sociales en los que amenazaba a Ciudadanos y a su líder en Cataluña, Inés Arrimadas; animaba a los violentos del barrio barcelonés de Gracia; y aplaudía sin tapujos el terrorismo.
Hasel es el rapero de referencia de Podemos, un sujeto patrocinado por Pablo Iglesias y Juan Carlos Monedero, pero a los que ahora considera títeres de la oligarquía para sofocar la revolución. Su padre, don Ignacio Rivadulla, fue presidente de la Unió Esportiva Lleida, el equipo de fútbol de la ciudad, y posee un negocio dedicado al control de plagas, desinfección y desratización de edificios.
Lo más popular
-
Delcy y Aldama planearon un encuentro con el dueño del aeropuerto de Ciudad Real para colar sin control mercancía -
El golpe invisible a los jubilados futuros: el Gobierno sube 10 veces más la penalización a los salarios que la pensión máxima -
La cronología de la 'operación Moncloa' contra Ayuso que acredita el acta notarial de Lobato -
Sánchez pide ahora a a los soldados que no mandó a la DANA que contribuyan a pagar los gastos -
El Colegio de Abogados de Madrid pide al Supremo que impute a Pilar Sánchez Acera por la filtración del correo
Ver los comentarios Ocultar los comentarios