Tan solo unas horas ha durado la propuesta de Podemos al PSOE de un "acuerdo de reciprocidad" para elegir al presidente del Congreso de los Diputados.
Los socialistas han dicho "no" a la proposición de Pablo Iglesias de que el candidato que pasase a la segunda votación este martes, bien fuera Patxi López o Xavi Domènech, recibiese el apoyo de los diputados del otro grupo.
Las conversaciones entre Podemos y el PSOE comenzaban pasado el mediodía. Tras el acuerdo ente el Partido Popular y Ciudadanos para presidir la Mesa del Congreso, Pablo Iglesias intentaba a primera hora de la tarde hacer un último intento para que hubiera un "presidente progresista" en la Cámara Baja. Llamaba a Pedro Sánchez y le explicaba su plan, ya fracasado.
El plan de Iglesias
El líder de Podemos proponía al PSOE que, en la primera llamada a la urna para elegir al presidente del Congreso este martes, cada uno votase por su candidato: los diputados del PSOE por Patxi López y los de Podemos por Xavi Domènech. Los nacionalistas catalanes y vascos tenían entonces la llave para decidir qué candidato pasaba a la otra ronda.
En la segunda votación, el candidato "progresista" que más apoyos obtuviera, sería apoyado por el otro partido.Siempre según el plan de Podemos, en ese momento sí que hubiesen necesitado, por lo menos, el apoyo de los 17 diputados de ERC y CDC para superar a la candidata del PP, Ana Pastor, que ya tiene el respaldo de 169 miembros de la Cámara.
Pues bien, el PSOE, a última hora de la tarde rechazaba ese plan y las pretensiones de Podemos se iban pique.
Y ahora, "por coherencia", desde el partido de Pablo Iglesias aseguran que en la segunda votación de este martes, ellos se verán "obligados" a apoyar a Patxi López.