La polémica del "cafè amb llet" continúa. Salvador Sostres intercedió por Quimi Portet y en contra del empleado de la compañía Baleària en su comentario leído en la Cope este pasado martes. Se destacó el calificativo "mamarracho" que utilizó Sostres para definir al camarero y la frase: "Pero es que además, por encima de Cataluña, España, Italia, Francia o Grecia, la gran patria es la derecha, hay un orden y este orden es jerárquico, y sólo faltaría que nos pareciera bien que el servicio se nos subiera a las barbas".
Esa misma tarde, Sostres, en atención a las múltiples críticas recibidas, se puso delante del teclado para insistir en sus tesis y ajustar cuentas. De este modo colgó de su página en Facebook un texto en el que reprocha a los partidarios del camarero que "os falta Ritz y os sobre histeria". También afirma que "os ciega un patriotismo chusquero y un honor de entrepierna. Sois primarios hasta decir basta". En suma, una nueva "argumentación" sobre las relaciones humanas, la jerarquía y una supuesta romanización incompleta de una parte de España que, según Sostres, lo explica casi todo.
Por el interés que aún suscita el incidente lingüístico entre el músico Portet y un camarero del Ferry de Baleària de la línea Formentera-Ibiza, reproducimos íntegramente el texto de Sostres en su muro:
Sobre las respuestas a mi artículo sobre el mamarracho de Baleària que insultó a Quimi Portet:
No comento nunca las respuestas a mis artículos, porque es un ejercicio estéril, y en cualquier caso mi trabajo es "proponer" y no "responder".
Pero en este caso me parecen todas ellas, en su conjunto, la metáfora de algo que, por penoso, me gustaría subrayar.
Os ciega un patriotismo chusquero y un honor de entrepierna. Sois primarios hasta decir basta. Os puede el desprecio, la ignorancia, la rabia. La peor España. No estamos como estamos por casualidad ni sólo por la enajenación de unos cuantos. Que ante un episodio tan meridiano las respuestas sean de este nivel, de esta falta de respeto a la razón, y a la inteligencia, indica que la pulsión de la tribu os puede y que los romanos hicieron a medias su trabajo.
Por suerte no toda España es así, y tiene más recursos que el de la piedra en la mano. Os falta Ritz y os sobra histeria. Tanto en el incidente como en las respuestas subyace un problema de clase social.
El problema de la "clase social" ya se apuntaba en la primera misiva de Sostres. No así lo de los romanos.
En la prensa nacionalista catalana se reniega de Sostres pero se coincide en el diagnóstico: Quimi Portet es una víctima de la caverna españolista y del dicho ¡cómo está el servicio!