Los diputados de Esquerra Republicana de Cataluña en el Congreso Joan Tardà y Gabriel Rufián acudieron a su reunión con Mariano Rajoy con una sorpresa entre manos. Ambos aprovecharon su visita a La Moncloa para entregarle una memoria USB con las conversaciones del ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, con el exdirector de la Oficina Antifraude de Cataluña, Daniel de Alfonso, en las que supuestamente intentaban sacar a la luz casos de corrupción relacionados con Esquerra Republicana y Convergencia Democrática de Cataluña hace dos años.
Así lo explicó el portavoz de Esquerra, Joan Tardà, en la rueda de prensa que ofreció en el Congreso tras verse con Mariano Rajoy. Según Tardá, se trata de un "acto simbólico" porque está convencido de que el presidente ya había escuchado las conversaciones. Aún así, vio necesario hacerle entrega de las conversaciones porque lo que se dice en ellas es "algo inadmisible".
Por eso, pidieron a Rajoy la dimisión de Jorge Fernández Díaz porque sus palabras con el director de la Oficina Antifraude "abren un camino muy peligroso" ya que "si uno empieza vulnerando derechos civiles, nunca sabe donde puede acabar", señaló.
Según Tardá, el presidente en funciones no dijo nada sobre su ministro del Interior y tan solo se limitó a contestarles que "ya había reclamado una investigación" sobre todo lo que ha ocurrido. Una investigación, por cierto, que aún no ha dado sus frutos.