El Mundo abre con el atentado en Irak. "El IS responde con el terror a sus derrotas militares". Federico Jiménez Losantos dice que a Rajoy le asaltan dos tentaciones. "La primera es ir otra vez a elecciones, echándoles la culpa a Ciudadanos y al PSOE. La pésima gestión del resultado electoral por Rivera y Sánchez permite a Mariano abrigar la hipótesis de quitarle un millón de votos a C's, telerreflotando a Podemos para mantener a raya al PSOE (...) La ventaja de esa tentación es que le permite tirar medio año sin control del Parlamento y no asumir las obligaciones que, por el déficit disparado, nos impondrá la UE. La desventanja, que se rompería la tendencia actual, que favorece al PP". La segunda tentación es "gobernar en minoría gracias a la abstención de C's y PSOE, sin hacer reforma alguna y con el mismo Gobierno de amigotes, cloacas incluidas, mientras prescriben o se agostan en los juzgados los casos de corrupción del PP. Esta tentación es peor que la primera. Temo que es en la que caerá". ¿Peor que otras elecciones? Raúl del Pozo dice que a nuestros cuatro mozos se les ha ido la pinza. "No parecen libarse los candidatos del síndrome de la soberbia. La adicción al poder, la obsesión de destruir al adversario por nuestros candidatos, está empezando a ser un trastorno, según confiesan ellos mismo. Frente a la mesura y moderación que necesita el país, muestran ego desbocado y delirios de grandeza". Qué cruz, Dios mío, qué cruz.
Y como éramos pocos parió la abuela, dice El País. "Una rebelión interna en el PSC frena la consulta 'a la canadiense'". "Varios dirigentes se encaran con la dirección y bloquean la ponencia, que también es rechazada por el PSOE". Qué partido, lo que les gusta meterse en charcos innecesarios. ¿Como es que no crearon un grupo de wasap para ponerse de acuerdo antes de liarla delante de todo el mundo? Cuenta El País que "Sánchez consultará con cada uno de los barones el voto de la investidura". O sea, que mientras Rajoy hace la ronda disfrazado de Rey, Sánchez hace la propia en su partido. Pues nada, así nos van a dar las uvas. El editorial echa la bronca a Rajoy por lo mal que ha tratado al PNV. "Urkullu ha aportado un admirable periodo de estabilidad al País Vasco y ha desactivado un foco de conflictos al descartar la vía separatista azuzada en Cataluña durante la pésima etapa de Artur Mas. Esta situación convertía a Urkullu y a su partido, el PNV, en los mejores aliados nacionalistas que podía esperar un gobierno de España. Sin embargo, Rajoy y el PP no escucharon las propuestas de Uukullu para gestionar el final definitivo de ETA, llenas de sentido común" y ahora el PNV pasa de Rajoy. "Rajoy debe darse cuenta de que no es demasiado tarde para rectificar".
ABC dice que "DAESH tiene un grupo específico para preparar atentados en España". Y en todos lados, por lo visto. Isabel San Sebastián tiene una corazonada. "Si vamos a nuevos comicios, la victoria está cantada: en el escrutinio, Mariano Rajoy. En las urnas, la abstención. Y en la sociedad, el desencanto con la democracia. Por goleada". Pero Ignacio Camacho cree que no habrá elecciones, sino un largo periodo de toma y daca. "Habrá gobierno y lo presidirá Rajoy, pero no será pronto ni fácil (…) La investidura se va a a cocer sin prisas, a fuego lento". Nada, nada, que se tomen su tiempo, no hay prisa.
La Razón adelanta que "el Comité Federal del PSOE levantará el veto para negociar con el PP". "Quieren aprobar una resolución que tenga como única línea roja evitar nuevas elecciones". Dice el editorial que "los socialistas no están en condiciones de poner condiciones leoninas para facilitar el Gobierno a los populares". ¿Cómo que no? "El problema reside en que el PSOE no encuentra la fórmula ni el relato que permita dejar gobernar a los populares". Hombre, es que menudo marrón. Por lo que Marhuenda presiona un poco con el hombre del saco. "El riesgo de que Pablo Iglesias le supere sigue siendo real". Abunda en este espantajo Fernando Rayón. "Ningún dirigente del PSOE ignora que no puede haber nuevas elecciones. Y no por el hartazgo de los españoles, que ya es mucho, sino porque la nueva convocatoria reduciría aún más sus resultados y quizá el adelanto de Podemos sería ya irreversible". Que viene el coco.