Hace apenas un año que se conocen y, sobre todo, que les conocen los madrileños. Begoña Villacís (Madrid, 1977) e Ignacio Aguado (Madrid, 1983) se mueven con normalidad por la capital de España. Su llegada escalonada a un restaurante de la Plaza de Santa Ana, donde Ciudadanos cerraba su campaña el pasado diciembre, no despierta excesivo tumulto. Ambos eligen el mismo menú: huevos de primero y merluza de segundo. Aguado se desmarcará con un helado de café en los postres, mientras que Villacís opta por un café con leche. Libertad Digital les ha reunido cuando se cumple un año de su llegada a la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid, siendo sostén parlamentario del Gobierno en la primera de las instituciones y oposición en la segunda.
Díganme lo mejor y lo peor de este año de Ciudadanos en las instituciones de Madrid.
Ignacio Aguado: Lo mejor demostrar que otra política es posible, y lo peor las herencias de la vieja política, las rutinas de las mayorías absolutas que algunos no han abandonado del todo y que poco a poco vamos venciendo.
Begoña Villacís: Lo mejor es que ha habido un cambio y lo peor es que ese cambio podría haber sido a mejor.
Sin Ciudadanos, ¿qué no se hubiera hecho en Madrid?.
IA: Tendríamos el Canal de Isabel II semi privatizado, la Sanidad, su gestión, en vías de privatización y habría un Gobierno del PP sin el control de Ciudadanos. No se habrían reducido las tasas universitarias ni las cuotas de escuelas infantiles, no se habrían aumentado los presupuestos de atención primaria ni los profesores de educación pública.
BV: No hubiesen ocurrido muchas cosas. Estamos haciendo una oposición seria y constructiva, con siete concejales estamos siendo la oposición de verdad. Sin nosotros no hubiésemos tenido la auditoría que se ha pedido para el Ayuntamiento, no se hubiesen presentado bajadas de impuestos, que eran necesarias después de las tasas creadas por el PP para pagar una deuda enorme que se inventaron ellos mismos. Sin Ciudadanos no se hubiesen despolitizado las mesas de contratación, que eran un foco de corrupción en el Ayuntamiento de Madrid. También hemos propuesto muchas iniciativas de carácter social referentes a la gente sin hogar o a las escuelas infantiles.
Nuestra labor de control ha sido muy importante, los casos de enchufismo del equipo municipal los hemos sacado nosotros, o los viajes del partido que pagan los madrileños o cuando también se traen a Varoufakis [Yanis] y le ponen la ciudad a sus pies con coste al contribuyente.
El Gobierno Carmena, una advertencia de futuro
En este año se ha llegado a hablar en varias ocasiones de la "operación Villacís", que consistiría en desplazar a Ahora Madrid del Ayuntamiento con un acuerdo de PP, PSOE y Ciudadanos, en el que usted podría ser una figura de consenso. ¿Es posible?. Sería algo parecido a lo que está planteado Albert Rivera para el Gobierno de España.
BV: La situación no es replicable, en otros lugares no hay una Esperanza Aguirre o una Manuela Carmena o un Antonio Miguel Carmona. Quizá yo soy el elemento más replicable. Sería como si Mariano Rajoy le dejase ser presidente del Gobierno a Pedro Sánchez.
Lo que sí puede ocurrir es que el PSOE entre a formar parte del Gobierno municipal.
BV: ¿Más todavía? [sonríe].
Me refiero a que tuviesen concejalías.
BV: En la practica ya hay un gobierno de coalición, como se está demostrado en muchas cosas como los presupuestos o la Operación Chamartín. En esto es muy importante enfatizar, ya que está aquí Ignacio, el papel de Ciudadanos en la comunidad en contraposición al del PSOE en el Ayuntamiento. Nadie puede decir que no estemos haciendo oposición en la Asamblea de Madrid, mientras que los socialistas están entregados al equipo de Manuela Carmena. Así se evidencia cuando, por ejemplo, presentamos una moción para crear una oficina antifraude y votan en contra pese a llevarlo en su programa. Tienen una hoja de ruta para entrar al Gobierno después de las elecciones. El otro día se le escapó a una concejal de Ahora Madrid, es un secreto a voces.
Ha hablado de la Memoria Histórica. Hay una cierta rectificación, con un nuevo comité en el que, entre otros, está Andrés Trapiello, precisamente a propuesta de Ciudadanos.
BV: Lo valoramos positivamente. Cuando este comité recibe el rechazo de los sectores más radicales, es que van por el buen camino. Francisca Sauquillo fue elegida para que el PSOE no votase la reprobación de Celia Mayer, eso está claro. Fue una moneda de cambio, pero creo que está tratando de ser conciliadora y ha cogido una buena dirección. Todavía no han quitado ninguna placa de Carmelitas, eso ya es un logro.
¿Cómo valora el desenlace de la Operación Chamartín?.
BV: Se ha votado la renuncia después de años sin haber hablado con el inversor privado, ha sido todo para sacar adelante el proyecto del PSOE. El Ayuntamiento, durante el pleno, sabía que Fomento le estaba reclamando seiscientos millones, y no nos dijo nada a los grupos de la oposición.
El proyecto incluye un 70% menos de edificabilidad, pero prometen más puestos de trabajo, que nos lo expliquen. Lo peor de todo es que nos carguen el coste a todos los madrileños, están gestionando el dinero ajeno, sólo se puede hacer aumentando la deuda, que no pueden porque han renunciado a las agencias de raiting, o aumentando los impuestos, que no les vamos a dejar.
Otro asunto importante: Wanda.
BV: No es el único, podríamos hablar también de la operación Campamento o de otras cuestiones, como el mercado de Legazpi, que eran casi dos mil puestos de trabajo, y han renunciado porque era inversión privada. Nosotros hemos calculado que se ha renunciado a más de cien mil puestos de trabajo. Ahí es donde te das cuenta lo que podría suponer para España un año con Podemos en el Gobierno. Aquí se han cargado un punto porcentual el desempleo en Madrid, siendo la practica totalidad del empleo destruido femenino. Además sólo hay cuatro barrios que han mejorado, entre ellos el de Salamanca o Chamberí, empeorando los del sur.
Resumiendo: más desigualdad y más brecha de género. Imagínese lo que Podemos podría hacer en cuatro años. Es increíble, no les duelen prendas en dar portazos a inversiones de miles de millones. Su gestión no hay por donde cogerla, por ejemplo: incautan menos a los manteros pero multan más a los hosteleros. Wanda se va en busca de un Ayuntamiento que no tenga miedo a la inversión privada.
Con y sin Cifuentes
Ignacio, su caso evidentemente es distinto, está en la oposición pero respaldando al Gobierno de Cristina Cifuentes.
IA: No lo estamos respaldando, hemos permitido que haya Gobierno, que es lo que ahora, precisamente, quieren todos los españoles a nivel nacional. Nosotros, sin pedir sillas, hemos conseguido que haya Gobierno y que se comprometa a llevar a cabo reformas inéditas. Con diecisiete diputados hemos sido el verdadero voto útil en Madrid. Hemos sido capaces de llegar a acuerdos con unos y con otros, demostrando que existe un espacio de centro político. Eso se ve, sin ir más lejos, en los presupuestos: hay un compromiso de no subir impuestos ni crear nuevos, más inversión en concertada y en atención primaria, menos tasas para los estudiantes, rebaja de las cuotas de escuelas infantiles, la bajada del precio del transporte para los jóvenes y la congelación de la tarifa para cuatro años. Todo eso está mejorando la vida de los madrileños. Eso y el compromiso de que los imputados por corrupción política se tienen que ir.
¿El camino del PP de Madrid es el camino que debe seguir el PP nacional después del 26-J?
IA: Ellos son los que deben decidir si quieren regenerarse y abrir su partido. Nosotros sabemos lo que queremos. Pero, como repite Albert, si no sabes limpiar tu casa difícilmente puedes hacer esa tarea en España. Si en vez de pedir explicaciones a Rita Barberá lo que haces es aforarla, no me están dando la sensación de quieras tomarte en serio la regeneración política.
Las medidas en Educación, como la gratuidad en los libros de texto, ¿son extrapolables al pacto educativo nacional que defiende Rivera?
IA: Totalmente. La gratuidad de los libros la acaban de presentar en el Parlament de Cataluña, es un paso más en el desarrollo del artículo 27 de la Constitución, que habla de la igualdad de oportunidades y la gratuidad en Educación. Cada familia se ahorra de media de 300 euros anuales por hijo, cuadrando las cuentas, porque el coste sólo se imputaría a partir de 2018. El precio de los libros no puede ser una barrera para que estudien los hijos de familias humildes.
Telemadrid. ¿Realmente se puede hacer una televisión pública completamente alejada de la influencia política?.
IA: Se están dando pasos. La nueva Ley cambia la elección del director general y del Consejo de Administración. Por primera vez en la historia los nueve miembros del Consejo han sido elegidos por unanimidad y por primera vez el director será elegido por un concurso público, que deberán ratificar dos tercios de la Asamblea. Por lo menos PP, PSOE y Ciudadanos nos tendremos que poner de acuerdo. Ese director tendrá las manos libres durante un mandato de seis años.
Mirando al 26-J
La primera polémica de la campaña de Ciudadanos ha venido por el vídeo. Díganme sinceramente si les gusta.
IA: A mí sí, es algo en clave de humor que refleja una realidad. En España hay inmovilistas, populistas y una gran mayoría que quiere un cambio sensato, a mejor.
BV: Acepto las críticas, pero el vídeo es un revulsivo. Es una conversación que se puede tener en cualquier cafetería de España. Hemos decidido apostar por la gente anónima, tenemos la suerte de tener al líder mejor valorado, y por lo tanto no tenemos que utilizar el spot de campaña para reforzarle.
Pero en el vídeo están totalmente ausentes el PSOE y Pedro Sánchez, parece que no van a ser protagonistas de su campaña.
BV: Estos meses no han pasado en vano, nosotros diferenciamos entre partidos útiles e inútiles. Somos distintos al PSOE, pero en ellos hemos encontrado, por lo menos, a un grupo que se ha querido sentar a buscar soluciones.
IA: No es un vídeo, ni será una campaña, de atacar. Lo que hace el PP con nosotros y en lo que vive instalado Podemos.
Les pregunto ahora como miembros de la Ejecutiva del partido. A la espera de que se confirme el programa, ya sabemos que renuncian a algo que parece una seña de identidad, como han explicado ustedes en el caso de la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento. Me refiero a la bajada de impuestos, que según Rivera sólo será posible al final de la legislatura. También se renuncia a la simplificación en dos tramos del IVA.
IA: Nosotros abogamos por una reforma fiscal, que combata, entre otras cosas, el fraude. Mire, el PP nos ha metido un gol a todos los españoles. Han dejado un agujero inesperado de 10.000 millones de euros, fruto del engaño del PP en un programa electoralista.
BV: Donde hay margen para bajar los impuestos lo hacemos. En Madrid lo hemos hecho con el IBI, y dentro de esta comunidad acabamos de presentar una propuesta de rebaja fiscal en el Ayuntamiento de Pozuelo y el PP ha votado en contra. Nuestro programa no es el de un vendedor de crecepelo, no es nuestro estilo. Somos el antipopulismo porque, entre otras cosas, cuadramos las cuentas y somos responsables. Que a nadie se le olvide que abogamos por pinchar la burbuja política mantenida por PP y PSOE con duplicidades como las de las diputaciones, que seguiremos proponiendo eliminar.
Ustedes siguen poniendo el foco en Rajoy. ¿Comparten un veto total y tajante al candidato del PP para que siga en La Moncloa?
IA: No es una cuestión de nombres, sino de proyectos. No se le puede dar un cheque en blanco a nadie.
Pero ustedes ahora apuestan por entrar en el Gobierno, a diferencia de diciembre.
BV: Sí, pero nosotros no hemos puesto sobre la mesa ni un solo ministerio. Eso contrasta con Pablo Iglesias pidiendo dirigir organismos tan de política social [sonríe] como el CNI.