El ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, ha salido de nuevo en defensa de los ocho guardias civiles que fueron acusados falsamente de maltratar a varios inmigrantes ilegales durante un violento asalto a la valla de Melilla en octubre de 2014 y que fueron condecorados la pasada semana durante el acto central del 172 aniversario de la Guardia Civil, pocos días después de que fueran definitivamente absueltos por la Audiencia Provincial de Málaga.
Y es que en la mañana de este miércoles, más de un centenar de colectivos sociales han lamentado la condecoración de los ocho agentes y han exigido al gobierno "una explicación pública de las razones de semejante distinción". Entre las asociaciones que firman el comunicado aparecen algunas de las que interpusieron la querella, como Andalucía Acoge o SOS Racismo, y otras muy conocidas como CEAR, Oxfam Intermón o Ecologistas en Acción.
"Sobre esa declaración que han hecho, quejándose con palabras muy duras por haber condecorado a los guardias civiles que han resultado absueltos y que han estado imputados durante casi dos años por su actuación en el perímetro fronterizo de Melilla, debo decirles que cien veces que tuviera la oportunidad, cien veces que les volvería a condecorar", ha dicho el ministro tras el acto de jura de la XXII promoción de inspectores jefe de la Policía Nacional.
"Les recuerdo que estamos en un Estado de derecho y les recomiendo que se lean el fallo de la Audiencia Provincial de Málaga donde dice que los vídeos, lo dice tres veces la Audiencia, no yo, fueron manipulados con la finalidad de conseguir el objetivo que perseguía la denuncia. Además dice que los guardias civiles actuaron en el marco de la legalidad, con proporcionalidad y congruencia ante la situación a la que se vieron abocados", ha proseguido.
Y tras esto, ha vuelto a insistir en que volvería a condecorar a los ocho agentes que fueron denunciados en los tribunales por las ONG partidarias del papeles para todos: "Cien veces que tuviera la ocasión, cien veces que volvería a condecorar a esos guardias civiles que ejemplarmente, y en situaciones muy complejas y difíciles, sirven a España, en este caso en la ciudad de Melilla, como lo hacen en la ciudad de Ceuta o allí donde se les ordena".