Alberto Ruiz Gallardón no permanecerá en la postrimerías de este juicio del caso Nóos como un testigo vital. Quien fuera ministro de Justicia ha acudido a la Audiencia Provincial de Palma para declarar sobre todo en calidad de exalcalde de la capital de España. Para dar explicaciones concretas de un pago encubierto de 140.000 euros que la sociedad Madrid 2016, que sustentaba la candidatura olímpica de la ciudad, efectuó a la Fundación Deporte, Cultura e Integración social, una de las firmas vinculadas a la trama.
Quizás han destacado más las preguntas que las respuestas; y especialmente una valoración. No hay día en que Manuel González Peeters, abogado de Diego Torres, no reciba una reprimenda por parte del Tribunal debido al tono y al vocabulario que emplea para la formulación de sus cuestiones. Pero este jueves probablemente ha rebasado el límite, con la suerte de que, por el momento y sin perjuicio de lo que den de sí las grabaciones, no lo han escuchado las magistradas.
González Peeters -padre de célebre "soy un heterodoxo sexual"- ha intentado encerrar a Alberto Ruiz Gallardón en una contradicción. El político popular ha reiterado a lo largo de su comparecencia que no conocía Nóos en el momento de los hechos investigados, enmarcados en el año 2007. Por su parte, el abogado ha reclamado la exhibición de una serie de fotografías tomadas en una ponencia del exalcalde madrileño para la presentación del libro "El patrocinio visto por sus principales protagonistas", editado precisamente por el Instituto, cuyo logotipo se distingue en la portada de cada ejemplar.
Ruiz Gallardón se ha defendido en que no recordaba el acto dada la distancia entre el presente y aquel 2006 y en el hecho de que la conferencia estaba organizada por la prestigiosa institución de enseñanza económica ESADE, donde completaron sus estudios y se conocieron Iñaki Urdangarin y el propio Diego Torres: "No sabía quien era Nóos ni acudí por ellos". El acento del pulso ha subido paulatinamente hasta que el político ha invitado a González Peeters a observar el logo de ESADE en el micrófono de la ponencia. "No me invite a ninguna parte", ha replegado el letrado.
"Pone ESADE, es un hecho", ha instado Ruiz Gallardón. González Peeters ha contestado: "No, es un hecho según usted, que además no puede recordarlo...", para acabar concluyendo con un "...es idiota".
Gallardón se desmarca del delito
Como exalcalde de la capital, Alberto Ruiz Gallardón presidió la Fundación Madrid 2016, encargada según él de supervisar la evolución de la candidatura olímpica. El exministro ha leído el artículo del estatuto que delimitaba sus funciones: representación, conducción de reuniones y debates y voto de desempate, básicamente. Lo ha hecho para demostrar que las decisiones administrativas y de contratación eran competencia de la consejera delegada de Madrid 2016, Mercedes Coghen, a quien él mismo eligió y dio "plena y absoluta libertad" para operar. La directora figura entre los 18 acusados del caso Nóos y se enfrenta a peticiones de condena de 6 años y medio de cárcel de la Fiscalía Anticorrupción y 9 años de Manos Limpias por prevaricación, malversación, fraude y tráfico de influencias.
Aunque ha reconocido que el convenio de 140.000 euros que Madrid 2016 abonó a Nóos no se notificó a la Intervención General del Ayuntamiento para gavarlo en las cuentas municipales, Ruiz Gallardón ha manifestado que guarda con Coghen una relación de amistad y admiración profesional. El exalcalde se ha deshecho en elogios hacia la directora de la candidatura, rememorando como ejemplo el hecho de que, cuando Madrid perdió los Juegos Olímpicos de 2016 ante Río de Janeiro, el presidente del Comité Olímpico Internacional le felicitó por el trabajo realizado. De hecho, ha añadido que cuando revisaron las explicaciones de Coghen por un convenio del que no habían tenido "ninguna noticia", no encontraron "nada censurable".
Participación de Urdangarin
Iñaki Urdangarin y Alberto Ruiz Gallardón se conocían ya en el momento en que comenzó el sueño de Madrid 2016. Tanto que el exalcalde le ofreció el puesto que más tarde ocuparía la propia Coghen, es decir, la secretaría general o dirección de la candidatura. El testigo ha explicado que el marido de la infanta Cristina rechazó el ofrecimiento por carta con el argumento de que le ocupaban "otros proyectos profesionales".
Sin embargo, el también exministro ha apuntado que, a partir de entonces, Urdangarin colaboró puntualmente con la candidatura olímpica. Según Ruiz Gallardón, lo hizo de forma efectiva y de la misma forma que todos los miembros del Comité Olímpico Español, del que el exjugador de balonmano formaba parte; y los integrantes de la Casa Real -ha nombrado a los Reyes y las infantas- para establecer contactos y vínculos con las personas del COI encargadas de la elección final. Finalmente, ha subrayado de nuevo que aún así no tenía "en absoluto conocimiento" de la existencia de Nóos ni de que el exduque de Palma recibiera remuneración alguna de ese trabajo.