Denuncian vínculos entre el pequeño Nicolás y la extorsión de Manos Limpias

Francisco Nicolás Gómez Iglesias, más conocido como el pequeño Nicolás, habría intermediado en el supuesto chantaje de Manos Limpias al entorno de doña Cristina de Borbón para sacar a la infanta del banquillo del caso Nóos. Es la sospecha que ha planteado la Asociacion de Policia Municipal Unificada al Juzgado de Instrucción de Madrid que investiga por un presunto delito de estafa al joven, famoso por sus coqueteos con la escena política y sus cada vez más frecuentes apariciones televisivas.

El colectivo policial ha solicitado a la Justicia que cite en calidad de investigado al secretario general de Manos Limpias, Miguel Bernad. El líder del sindicato permanece encarcelado en la prisión de Navalcarnero por estar al frente de una supuesta organización criminal que extorsionaba a empresas, bancos y particulares: exigían grandes cantidades de dinero a cambio de ocultar información retirar a Manos Limpias y Ausbanc de la acusación popular en caso de corrupción.

Según la Asociación de Policia Municipal Unificada, el testimonio de Bernad resulta trascendente para explicar la supuesta colaboración del pequeño Nicolás en Nóos. El célebre personaje podría haber colaborado en "un delito de extorsión, con la finalidad de retirar la acusación popular en diferentes procedimientos, como el Caso Noos, Pujol o Nuñez".

Las confidencias de Francisco Nicolás

La APMU, que ejerce la acusación en el caso original contra Francisco Nicolás, quiere contrastar la declaración del joven prestada en octubre de 2014 ante el juez de instrucción. El madrileño, estudiante de Derecho, afirmó que había participado en el caso Nóos mediando entre Manos Limpias y la Casa Real para resolver las diferencias entre la infanta Cristina, Iñaki Urdangarín y Carlos García Revenga. El objetivo era minimizar la acusación del sindicato contra la hermana del Rey y su esposo.

La asociación policial también quiere que Bernad aclare una reunión con fecha 11 de septiembre de 2014 que habría mantenido con el pequeño Nicolás en un hotel de Madrid. Al terminar el encuentro, según el joven, un vehículo del Ayuntamiento transportó a Miguel Bernad a la sede de Manos Limpias sita en la calle Ferraz.