El guante lanzado por el Rey durante la ronda de consultas de esta semana, desvelado por el portavoz de Foro Asturias, Isidro Oblanca, para que los partidos gastasen menos en la campaña del próximo junio, parece haber surtido efecto. Tanto que se va a convertir en la primera batalla de la precampaña. La semana que viene los principales partidos políticos mantendrán un encuentro para discutir cómo y en qué conceptos ahorrarle dinero al contribuyente, algo a lo que en principio ninguna de las cuatro principales fuerzas parlamentarias se oponen.
Cuando se baja a la arena de los detalles comienzan las discrepancias. Ciudadanos abrió la veda ese miércoles, cuando su Ejecutiva planteó una bajada del 50% del límite de gasto, aunque en realidad la primera formación política que, ya hace semanas, habló de un pacto para bajar el coste de la campaña fue Unión del Pueblo Navarro (UPN), que cifró la reducción del presupuesto en un 30%, exactamente la misma propuesta que formalmente ha hecho el PSOE a través de una carta remitida por su secretario de organización, César Luena, al resto de partidos. Al PP no le parece mal, tal y como ha dicho su portavoz parlamentario, Rafael Hernando, que se ha comprometido a estudiarlo.
Por su parte, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha presumido de haber realizado la campaña menos costosa en diciembre, cuando Podemos gastó dos millones de euros: "Nosotros fuimos ejemplo. Pediríamos al resto de fuerzas políticas que gastasen lo mismo, que es poco. Creo que hemos demostrado que se puede hacer una campaña electoral con poco dinero".
El PP rechaza compartir el buzoneo
Lo cierto es que una bajada del 30% afectaría a Ciudadanos y Podemos, que sí o sí tendrían que gastar menos dinero que en diciembre, mientras que la propuesta de los centristas dañaría las campañas de los partidos grandes. Tras el último pleno de la legislatura celebrado este jueves, Albert Rivera se mostraba abierto a un pacto y manifestaba: "Los españoles se merecen el ahorro, y se merecen que si podemos gastar cuarenta y dos millones de euros menos, lo hagamos. Espero que los partidos tradicionales asuman que hay que gastar menos y hay que hacer una campaña más abierta. Por cierto: los debates son gratis, y espero que el señor Rajoy, a diferencia de la anterior campaña, sí que quiera ir a debatir con los demás candidatos". La propuesta de Ciudadanos supondría bajar de doce a siete millones el gasto máximo, mientras que el buzoneo compartido ahorraría, según los cálculos del partido naranja, más de cuarenta millones.
Sin embargo, el PP no está dispuesto a compartir el mailing, a juzgar por las palabras de su portavoz Hernando: "He visto que hay gente que propone que metamos todas las papeletas en un paquete. Pero claro, la elección del Senado no se hace con ese sistema, sino a través de un sistema de cruces. Por lo tanto, los partidos tenemos que tener derecho a enviar una papeleta con nuestras tres cruces diferenciada de lo que son otras papeletas".
En la pasada campaña el PP se aproximó a los doce millones de máximo, el PSOE gastó nueve, Podemos y sus confluencias casi cuatro millones, la misma cifra que Ciudadanos. IU no se quedó atrás, con un gasto de dos millones y medio.