El gobierno de Barcelona paga la factura de la luz a los okupas que llevan meses apostados ilegalmente en el edificio municipal Transformadors, que tendría que destinarse a un centro para la tercera edad, según informa El Mundo.
Así lo denunció este viernes a través de un comunicado de prensa el presidente del grupo municipal del PP en Barcelona, Alberto Fernández. El popular reveló que el Consistorio ha abonado 2.705 euros por el consumo eléctrico que se ha producido en el inmueble municipal desde que fuera tomado ilegalmente hace cuatro meses. Un total de 805 euros corresponden a la electricidad estrictamente consumida por los okupas para tener luz y utilizar electrodomésticos, pues el resto debía ser abonado de todos modos por el solo hecho de tener el servicio contratado.
Estos datos han sido facilitados por el ejecutivo municipal al PP después que el grupo de Fernández requiriese a Ada Colau conocer si, además de tolerar la okupación ilegal de la finca pública, estaba corriendo con el coste de los suministros que utilizaban los okupas.
Para Fernández, "ya no se trata de que los okupas no pagan la luz porque se conectan al alumbrado público, ahora hay una nueva modalidad, el propio Ayuntamiento es quien les paga el recibo de forma gratuita".
El PP alcanzó un acuerdo con el ex alcalde de Barcelona, Xavier Trias, para que, tras años de desuso, este edificio acabara convertido en un equipamiento para la tercera edad. Sin embargo, el proyecto ha quedado parado desde la llegada de Colau y el céntrico edificio del Eixample es utilizado por los okupas incluso para organizar conciertos sin actividad municipal.