El nuevo presidente de la Generalidad, Carles Puigdemont, lo ha dejado todo atado y bien atado en Gerona con la anuencia de su partido. El director de los Servicios Territoriales de Interior de la Generalidad en la provincia gerundense, Albert Ballesta, será su sucesor. La singularidad del nombramiento es que Ballesta figura en el puesto número 19 de la candidatura convergente que concurrió a las pasadas municipales. CDC, entonces aún como la coalición CiU, obtuvo diez concejales; ERC, 4; PSC, 4; CUP, 4; Ciudadanos 2 y el PP 1. De esta manera, además de la obvia renuncia de Puigdemont se ha tenido que sumar la de los ocho figurantes para que Ballesta pueda entrar en el ayuntamiento como concejal y optar a la vara de mando.
En declaraciones a los medios, Ballesta dice sentirse "absolutamente legitimado" para ostentar el cargo y no considera que su nombramiento suponga ninguna "alcaldada". Es más, sostiene que "la ley electoral española funciona con listas cerradas y bloqueadas de forma que la gente vota a toda la lista, del primero al último", del 1 al 25 en el caso de las municipales en la ciudad de Gerona.
Electos y hasta no electos
El impune dedazo ha causado un profundo malestar en el propio grupo del exalcalde Puigdemont, ya que todos y cada uno de ellos se han visto relegadas a una posición subalterna, conminados por el partido y por el actual presidente de la Generalidad para que acatasen la insólita elección de Ballesta. Puigdemont es el vivo ejemplo de que no se necesita encabezar ninguna candidatura para ser presidente de la Generalidad. Y el caso Ballesta es la confirmación de un paso más allá: hasta el último de la lista puede ser alcalde sin haber resultado elegido concejal.
El apaño ha molestado también al resto de los grupos municipales, ante lo que Ballesta ha dicho tender la mano. CDC gobierna en minoría, por lo que no sería descartable un acuerdo con ERC, igual que en la Generalidad, para consolidar una mayoría absoluta.
Este viernes por la tarde, si no hay contratiempos burocráticos, Albert Ballesta, un nombre de relleno en la lista pero un hombre de confianza de Puigdemont, será nombrado alcalde de Gerona. La CUP, que había llegado a denunciar a Puigdemont por sus actividades municipales, dice en un brindis al sol que "será legal, pero no legítimo". Si Mas designó a Puigdemont, Puigdemont hace lo mismo con el alcalde de Gerona, que tampoco estaba en ninguna quiniela.