A Mariano Rajoy le ha tocado hablar de los casos de corrupción que planean por el Partido Popular. En RNE, al presidente del gobierno en funciones, le han preguntado este lunes por la situación procesal del ex vicepresidente del Gobierno y ex presidente de Bankia, Rodrigo Rato. En concreto, sobre los cuatro años y medio de cárcel que pide el fiscal por el caso de las llamadas tarjetas opacas. Mariano Rajoy ha contestado que "no me gusta que acabe en la cárcel nadie, pero es el juez quien tiene que decidirlo". A esta afirmación ha añadido "que una cosa es lo que diga el fiscal y otra lo que diga el juez".
No solo de Rato ha hablado Rajoy también de Luis Bárcenas, en concreto del borrado de los ordenadores del ex tesorero del PP en la sede nacional. El presidente del gobierno dice estar tranquilo y tira balones fuera " De todo ese asunto no sé absolutamente nada, sé lo que me han contado". Sobre la reapertura del caso en los tribunales ha dicho tiene "bastante poco sentido todo"
Sobre la mesa también otro caso incómodo para los populares: el caso del diputado, Pedro Gómez de la Serna, investigado por corrupción. Rajoy ha asegurado que "debería devolver su acta de parlamentario", argumenta que el diputado por Segovia ya no es miembro del PP y que desde el partido se le "exigió" que abandonará el escaño. A esto ha añadido que "lo que haga la Fiscalía y lo que haga, sea lo que sea, bien hecho estará.