"Ataques del resto de líderes para noquear a Sánchez", dice El Mundo cruel. "Rajoy, Rivera e Iglesias explotan el desgaste del líder del PSOE y dan por muerta su campaña". Qué malas personas. Federico Jiménez Losantos dice que es que es más tonto que Abundio. "Víctima de un sectarismo estúpido suicida, Snchz ha tropezado en lo que siempre tropiezan los socialistas cuando se unen al yugo de los comunistas en una estrategia de Frente Popular: invitan a los caníbales a comer y acaban en la olla (…) Pablemos estaba técnicamente muerto y hecho pedacitos tras las municipales y autonómicas. Sin embargo, Sáncheztein unió los pedazos de mareas y líos en común, le entregó los principales ayuntamientos españoles y ahora resulta que el Gobierno del PP no sufre sino que se beneficia de los dislates de Carmena mientras que el PSOE está casi carbonizado por el fuego podemita. Él y solo él dio vida artificial al monstruo (...) Debió respetar a la media España que no es de izquierdas y esperar al vencedor del pulso centrista entre Ciudadanos y el PP. Le pudo el sectarismo". Pues que se fastidie. Sólo Casimiro García-Abadillo muestra un poco de caridad cristiana con el pobre Pedro. "Yo no le daría por muerto", dice con conmiseración. "Tiene una baza de la que carecen los tres contendientes. Si logra vencer con claridad en el debate del lunes puede invertir la tendencia actual, dejar de ser una víctima, convertir al PSOE en el voto útil contra Rajoy". Hala Casimiro, hoy no tienes que ayudar a cruzar a una viejecita, ya has hecho la buena acción del día.
El País sale al rescate del soldado Sánchez, que diría Rivera. "Sánchez pide el voto útil de la izquierda para el PSOE", le anima en portada. "Votar a Podemos es regalar el voto a Rajoy, afirma en un intento de parar la recuperación de Pablo Iglesias". ¿Parar a Pablo Iglesias? Pero si le ha puesto el poder en las manos, parece su socio. El editorial es de carcajada. Desprecia a Pablo Iglesias, que "carece de opciones para llegar a La Moncola (…) Sus comparecencias, por jaleadas que sean a través de las redes sociales, precisan de más rigor para poder reivindicar un grado de confianza más amplio". Los únicos que tienen "hechuras presidenciales" son Rivera y Sánchez. Pero "mientras el aspirante del PSOE se ha conducido por encima de lo esperado, la próximidad de los focos ha perjudicado las altas expectativas creadas en torno al candidato de Ciudadanos". Caramba, Pedro por encima de lo esperado. ¿Pero qué esperaban, por Dios? "Rivera es un edificio a medio construir. En cambio, Pedro Sánchez ha demostrado mayor altura política, profundidad de propuestas y un aplomo personal más acorde a lo que se espera de un candidato a jefe del ejecutivo. En un entorno no muy alentador, probablemente es quien más capacidades está mostrando para abordar los complicados retos institucionales, políticos, económicos y sociales de la España de hoy". Suponemos que el editorial lo escribió Cebrián antes de oírle berrear en La Coruña. Dicho esto, le regala todo un paginón a Pablo Iglesias, que se marca un interminable artículo titulado "Un nuevo compromiso histórico". ¿Pero no decís que a sus comparecencias les falta rigor? Qué manera de desprestigiar el periódico, ahí escribe cualquiera.
ABC dice que "Rajoy arremete contra un Sánchez debilitado por las encuestas y el debate". Muy bonito, eso de no ir al debate y luego aprovecharse de sus consecuencias. Ignacio Camacho le remata. "Salió herido porque cometió dos errores graves. El primero era su propia presencia sin la de Rajoy: no debió aceptar un debate en ausencia del presidente, un esquema que lo vuelve a equiparar con Iglesias y Rivera, como si les disputase la primogenitura de la oposición. Y el segundo, permitir que el líder de Podemos le chuleara". "Iglesias fue desde el principio a por Sánchez, a quien ninguneó con condescendencia venenosa". Encima de que le ha regalado ayuntamientos a porrón. Qué desagradecido este Pablo.
La Razón sigue a lo suyo. "El PP cree que el efecto Soraya frenó la fuga de votos a C's". Pedro Narváez dice que "Rivera se movía porque quiere quedarse quieto (…) No quiere que se sepa si al final habrá tripartito". Qué perra. El periódico dedica un montón de titulares a darse pisto con el debate. Que si "Atresmedia hizo historia", que si fue "una gran victoria". Hasta que llega el tocapelotas de Ussía a fastidiar el invento. "Poco puedo opinar del debate. Me aburrieron los cuatro. Un formato maligno. Ahí, los cuatro de pie, sin un atril para posarse ni un sillón para relajar sus palabras. En los debates, lo esencial es el contenido de los mensajes, no los movimientos de las piernas". Más razón que un santo tienes Ussía. A ver si se lo dices a tus jefes.
La Vanguardia también se ceba en Sánchez. "Rajoy reaparece y reparte criticas a Sánchez y Rivera". Enric Juliana dice que Sánchez está al borde del "precipicio", que "en Ferraz están sonando las alarmas", que "Pedro Sánchez se ha convertido en el hombre que batir". Y ellos, como buenos españoles, se suman a la fiesta.