La vicepresidenta y portavoz del Gobierno catalán, Neus Munté, ha exigido al jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, "respeto por la democracia y por la libertad de expresión", y ha rechazado sus "amenazas" por la resolución independentista pactada por Junts pel Sí (JxS) y la CUP.
Minutos antes de la comparecencia de Rajoy tras la presentación de la propuesta de resolución de JxS y la CUP, en la que se declara "solemnemente" el "inicio del proceso de creación del estado catalán independiente en forma de república", sin supeditarse a lo que pueda decir un Tribunal Constitucional (TC) "deslegitimado", Munté ha expresado su aval al texto acordado.
De Rajoy, el gobierno autonómico, ha dicho, "sólo espera respeto por la democracia y la libertad de expresión", puesto que "los Parlamentos democráticos tienen la función de canalizar los mandatos democráticos". Según Munté, "precisamente eso es lo que quiere hacer el Parlament", tras las elecciones.
En el transcurso de la rueda de prensa posterior a la reunión del Ejecutivo autonómico, Munté ha ido conociendo los mensajes lanzados por Rajoy, que ha advertido de que pondrá en marcha todas las medidas políticas y jurídicas en defensa de la soberanía del pueblo español si llega a aprobarse la propuesta de JxS y la CUP.
Para Munté, las palabras de Rajoy representan una "amenaza explícita" que "no es propia de un gobierno ni de un estado democrático". Tales declaraciones se explican, a su juicio, porque Rajoy "ha entrado en campaña electoral" y sabe que "determinados discursos y tonos en relación con Cataluña tienen rentabilidad electoral".
Después de que JxS y la CUP obtuviesen la mayoría absoluta de escaños en el Parlamento catalán, según Munté, el camino independentista dispone de "legitimidad democrática", de manera que la resolución no se puede entender como una "provocación" sino como el "cumplimiento de un mandato democrático". No dice Munté que la lista de JxS no obtuvo esa mayoría absoluta, a pesar de queArtur Mas convocó dichas elecciones en clave plebiscitaria.
Pese a que la resolución pactada por JxS y la CUP establece que el proceso hacia la independencia "no se supeditará a las decisiones de las instituciones del Estado español, en particular del Tribunal Constitucional (TC)", a quien consideran "deslegitimado", Munté ha subrayado que el gobierno autonómico debe "cumplir la legalidad que emana del Parlament".
"Estamos convencidos de actuar dentro de la legalidad, la legalidad no es única", ha reflexionado la vicepresidenta catalana, que ha puesto como ejemplo la suspensión del decreto contra la pobreza energética dictada por el TC, ante la cual se han tenido que buscar "otras vías" para conseguir el mismo "resultado" que pretendía el decreto. "No estamos desobedeciendo. Hemos tenido que repensar y articular maneras para minimizar el impacto de la pobreza energética sobre las personas mas vulnerables", ha razonado.
La resolución de JxS y la CUP prevé que en un plazo máximo de 30 días se inicie la tramitación de las leyes de proceso constituyente, de seguridad social y de hacienda pública. Munté ha calificado de "imprescindibles" estas estructuras de Estado "para poder avanzar" hacia la independencia y ha dado a entender que el actual gobierno catalán en funciones "está en disposición de continuar con los trabajos preparatorios" de estas leyes.
Por otra parte, también ha hecho una valoración de la legislatura que ahora acaba en España y que ha definido como "los peores cuatro años para Cataluña" de las últimas tres décadas, marcados por el "ahogo económico", la "recentralización" y el impulso de "leyes lesivas para los servicios básicos".