El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha declarado en una entrevista concedida a El Mundo que tiene "una relación más que especial con el presidente Rajoy y no haría nunca nada que pudiera perjudicarle". "Mi única ambición es que vuelva a ganar las elecciones. Dicho eso, lo que no soy es un señor que está en el asiento para decir lo que va a agradar al César o para intentar adelantarse a sus deseos", añade.
Margallo se centra en Cataluña, se refiere al debate que entabló con Junqueras -"Mi lucimiento personal es algo que me trae bastante sin cuidado", dice- y a la reforma constitucional: "Sólo debe producirse de acuerdo con los procedimientos establecidos por la propia Constitución y cuando haya un consenso como el del 78".
Sobre la aplicación del artículo 155, el titular de la cartera de Exteriores afirma que "forma parte de la Constitución, por tanto se puede aplicar cuando se den las circunstancias. Pero en el derecho y en la vida siempre se aplica el principio de gradualidad y proporcionalidad. Y en mi opinión, una declaración inconstitucional de independencia debe y puede ser corregida por el Tribunal Constitucional".