El Gobierno francés se ha reunido una docena de veces con el entorno de ETA desde finales de 2012, pocos meses después de que François Hollande consiguiera la presidencia. Según informa Fernando Lázaro en El Mundo, el objetivo pasa por impedir el traslado de los presos de ETA a España para cumplir el resto de sus condenas.
Fuentes de la lucha antiterrorista cuentan que, al menos en dos de esos encuentros, participó directamente la ministra de Justicia, Christiane Taubira. Perteneciente al ala más a la izquierda del Partido Socialista francés, el entorno político de ETA vio su perfil como el más cercano para lograr un acercamiento al Ejecutivo de Hollande.
ETA y su entorno crearon una comisión de "marca blanca" con corte político, integrada por Jean François Lefort y Jean Gabriel Mouesca. El primero es un veterano militante de la "izquierda abertzale" y en la actualidad forma parte de la dirección de Sortu en Francia. El segundo está vinculado con organizaciones como el Observatorio Internacional de Prisiones.
Además, Mouesca militó en la organización terrorista Iparretarrak, participó en atentados con ella y estuvo 17 años en prisión, entre 1984 y 2001, por su implicación en un homicidio. En 2011 se integró en Koordinatzio Taldea (KT), el subaparato de ETA responsable de la cohesión de los presos en el interior de las cárceles.
Así, en estas doce reuniones, el entorno etarra ha conseguido que Taubira se comprometa a que ningún preso de ETA que cumpla condena en Francia sea trasladado a España sin su previo consentimiento. La banda terrorista pretende boicotear la puesta en marcha del intercambio de presos con Francia en el marco de los acuerdos de la UE de 2008, en el que la opinión del reo no es vinculante. La medida afectaría a unos 60 presos.