La justicia francesa deja en libertad al etarra Plazaola

El etarra Alberto Plazaola, que se encontraba fugado de España desde marzo, ha sido puesto este miércoles en libertad bajo control judicial en Francia, en espera de que se examine la euroorden española que pesa contra él a partir del martes de la semana próxima. Fuentes judiciales dijeron a Efe que Plazaola no podrá mudarse del domicilio que ha dado en la localidad vascofrancesa de Ciboure, donde fue arrestado ayer lunes, y que tendrá que fichar regularmente en comisaría.

La sala de instrucción del Tribunal de Apelación de Pau (suroeste de Francia) decidió su puesta en libertad bajo esas condiciones de control en contra de la opinión de la Fiscalía, que había reclamado su encarcelamiento mientras se tramita la demanda de la Audiencia Nacional española. El próximo día 15 está prevista una nueva audiencia en esa misma instancia en la que se comenzará el examen de fondo de la orden de arresto.

El proceso, que en primer lugar depende de los documentos que transmitan las autoridades judiciales españolas para justificar su entrega, puede prolongarse varias semanas e incluso algunos meses si hay recursos ante el Tribunal Supremo. Por ahora, el Tribunal de Apelación de Pau lo único que tiene es "una ficha Schengen" que relaciona la euroorden contra este terrorista de ETA con el hecho de que tiene pendiente de cumplimiento una parte de su condena, precisaron las fuentes.

Plazaola quedó en libertad en diciembre de 2014 al descontar la Audiencia Nacional las penas que cumplió en Francia, pero el pasado mes de marzo el Tribunal Supremo anuló esta decisión y ordenó su detención. El auto del Supremo, que debía significar su reingreso en la cárcel, se filtró a la prensa el 10 de marzo, horas antes de que las fuerzas del orden tuvieran la orden para arrestarlo. Cuando acudieron a su domicilio en la localidad guipuzcoana de Oñate, ya no dieron con él.

Este antiguo miembro del grupo Araba de ETA, al que se atribuyen varios atentados a finales de los años 80, fue detenido en 1990 en Francia, donde cumplió tres años de prisión antes de ser extraditado a España, donde fue juzgado y condenado a 46 años de cárcel.