La Guardia Civil a las puertas de la Fundación CatDem, de Convergencia, aporta contexto a la creación plataforma separatista Juntos por el Sí, donde el partido de Mas ha diluido sus siglas. CDC, como tal, no se presenta a las elecciones más importantes, según la propia formación, de la historia de Cataluña y eso se debe al peso de la corrupción institucionalizada, al 3%, a las adjudicaciones a los empresarios por la causa separatista, a las prótesis de cadera y columna caducadas y al largo listado de sumarios abiertos al pairo de los chanchullos convergentes en la charca administrativa catalana.
Camuflados en una candidatura "cívica" y bajo el manto de ERC, los dirigentes de lo que queda del partido de Pujol confían en que la desaparición práctica de las siglas les sirva para eludir responsabilidades al tiempo que replican con el argumentario de libro. Alegan que se trataría del enésimo caso de persecución contra el "president" Mas y Convergencia por abrazar e impulsar el separatismo. Las cloacas del Estado, la mano negra y que ya lo habían previsto y predicho.
Sin conexión política
Horas antes de la operación judicial en la sede de CatDem y en los ayuntamientos convergentes de Sant Cugat, Figueras, Lloret de Mar y Sant Celoni, Junqueras y el propio Mas se daban golpes en el pecho en materia de honradez y se conjuraban para acabar con la corrupción en la primera legislatura de la hipotética república catalana. Sin embargo, no hay conexión entre los registros policiales y el momento político, a un mes de las elecciones autonómicas.
El juzgado número 1 de El Vendrell (Tarragona) arrancó la operación el pasado julio, con la detención de Jordi Sumarroca, heredero y gestor de las empresas del grupo familiar más cercano a los Pujol. Amigos del patriarca del catalanismo, mantuvieron sus relaciones de privilegio con la Generalidad de Artur Mas, el chorro de adjudicaciones públicas con la derrama del 3% para la causa, el partido, la fundación y el cepillo personal. Sumarroca ingresó en prisión pero no estuvo ni tres semanas. A mediados de agosto fue puesto en libertad.
Réplicas y más réplicas del caso Pujol
Las grietas en la plataforma separatista se agrandan. Romeva reclama ir hasta el final, caiga quien caiga, y si es Mas, mejor. "La lucha contra la corrupción será una prioridad en el nuevo estado" dijo a TV3 Romeva mientras se desarrollaba la operación judicial. El número uno actúa como portavoz informal de ERC y Junqueras. La candidatura ha acusado el golpe. Además de la Guardia Civil, los fiscales José Grinda y Fernando Bermejo no se personan todos los días en la sede de una fundación política. Mas es el principal señalado y se le abre un nuevo frente. Un nuevo caso Palau, otro expediente clan Pujol, el auge y caída de los Sumarroca, el brazo empresarial del nacionalismo. Réplicas del sistema del 3%, la firma clientelar de Convergencia en los "negocios" públicos. Delitos contra la administración público, blanqueo de capitales y sobornos son los detalles delictivos del último caso.
La estrategia defensiva de CDC no cuela en ERC y genera cada vez más dudas en las entidades separatistas. Se confirma la sospecha de que Artur Mas necesitaba despojarse de sus siglas y que la candidatura "Juntos por el sí" es su coartada frente a la carcoma de la corrupción. "Juntos por el 3%" es la etiqueta que arrasa en las redes sociales.
El exdirector de la fundación convergente, el profesor de Historia, tertuliano y columnista Agustí Colomines, ha sido uno de los primeros nacionalistas en reaccionar. "No van a encontrar nada, en la fundación no hay documentos administrativos", manifestó a primera hora. Desde luego, en CatDem han tenido tiempo de borrar todas las huellas, pero en los registros que afectaron a Jordi Sumarroca en julio se hallaron nuevos documentos que confirman el papel de la fundación como caja B de CDC.
El mazazo a Mas lastra su posición en la plataforma separatista. Romeva, en la antes citada entrevista en TV3, reivindicaba sin reparos su liderazgo y aprovechaba la circunstancia para sostener sin sonrojo que "un nuevo estado es la mejor respuesta frente a la corrupción". De cara al público, tabla rasa, pero de puertas adentro, recelos, desconfianza y maniobras para descabalgar a Mas.