Nueva grieta en la candidatura unitaria. Raül Romeva acepta que Artur Mas sea el candidato a "president", pero será él quien participe en los debates electorales entre los cabezas de lista de los partidos. Así, ni Mas ni Junqueras tendrán presencia en los encuentros en los medios. Según Romeva, "es legítimo" que cada formación envíe a quien quiera a los debates y en su caso, al ser el cabeza de lista, no hay discusión.
No lo tienen tan claro en Convergencia, aunque la mayoría de sus dirigentes está de vacaciones y el portavoz de guardia, Jordi Turull, se dedica a completar las frases de Romeva. Temen que el protagonismo de Romeva reste plano a Mas y se quejan ante ERC de las baladronadas del amigo de Junqueras, como la de que Mas no tiene que ser necesariamente el candidato a la presidencia autonómica.
Salida de tono de Marta Rovira
El mal ambiente entre CDC y ERC es evidente, palpable y tan notorio que Marta Rovira, la número dos del partido republicano ha mostrado su malestar con un grupo de jóvenes separatistas en la "Universidad Catalana de Verano" que le preguntaban al respecto. "¿Tenemos un acuerdo o no? ¡Basta! Tenemos una fecha y un acuerdo pero el trabajo está por hacer. No tenemos más que un acuerdo, pero se debe ganar", declaró Rovira, quien según la crónica del digital El singular.cat estaba "visiblemente irritada".
La cuestión del representante de la plataforma de CDC, ERC y la ANC en los debates es otro de los focos de conflicto entre Mas y Junqueras y Romeva. El último ha dicho que no tiene ni ganas ni argumentos para defender la gestión de Mas y que sólo puede hablar bien del "compromiso" del líder convergente con su promesa de sacar las urnas el pasado 9 de noviembre. Mas todavía no ha reaccionado a esa andanada (aún está de vacaciones en Menorca), pero en su partido esperan que en breve retome su agenda y dé cumplida respuesta a las críticas recibidas en las últimas semanas.
Los principales problemas de Mas no proceden de sus adversarios políticos, sino de sus teóricos aliados. Todos los candidatos están en campaña, menos el "president". El vacío ha sido ocupado por Romeva y Junqueras, que durante el asueto de Mas han puesto en duda que vaya a repetir como presidente de la Generalidad, negocian abiertamente con la versión catalana de Podemos la opción de apoyar a otro candidato y ahora le usurpan la posibilidad de defender y representar a la opción separatista en los debates.
En ERC se escudan en que si no sale Junqueras tampoco tiene sentido que salga Mas en los medios y que la candidatura es una plataforma "cívica" de la que también forman parte la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Òmnium Cultural y decenas de agrupaciones separatistas, por lo que es natural que sea Romeva, un dirigente de "consenso", quien los represente a todos.
Maniobras para tener más representantes
En Convergencia no son de la misma opinión e incluso maniobran para que TV3, la televisión de Javier Godó y los medios que quieran realizar debates de las autonómicas catalanas se plieguen a la exigencia de que CDC y ERC tengan representación por separado en los debates. Se basan en que CDC, antes CiU, fue la fuerza más votada en las pasadas autonómicas y en que ellos no han cedido su representación a nadie, como sí ha hecho Iniciativa per Catalunya (IC), cuyos espacios electorales y presencia mediática ha sido prestada a Podemos.