Tal y como adelantó el diario israelí Jerusalem Post, el festival Rototom ha decidido hacer una rectificación en toda regla de su veto al cantante judío norteamericano Matisyahu, al que finalmente sí permitirá actuar el próximo sábado, tal y como estaba previsto en un principio.
Jerusalem Post hablaba en su información de "intensas deliberaciones" en la organización del festival "en las últimas 24 horas" después de las "críticas masivas" que la decisión de apartar al cantante judío ha despertado en todo el mundo.
Efectivamente, Rototom ha hecho público un comunicado poco después en el que rechaza el antisemitismo y cualquier tipo de discriminación, pide disculpas al cantante y asegura que le ha invitado de nuevo a su escenario.
Los responsables del festival reconocen "su equivocación, fruto del boicot y de la campaña de presiones y amenazas y coacciones promovidas por BDS País Valencià" que creyeron que podía "alterar gravemente el normal funcionamiento del festival", algo que les "impidió gestionar la situación con lucidez".
Además, en el mismo comunicado reafirman su "compromiso con la cultura de paz y del respeto entre culturas, incluida la libertad de creencias reconocida en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y en la Constitución Española".
Criticas sociales y políticas
La decisión que ahora ha rectificado Rototom lleva toda la semana como una de las noticias destacadas y ha generado una polémica internacional, apareciendo en medios de todo el mundo incluyendo Estados Unidos, país de origen de Matisyahu y, por supuesto, Israel.
La polémica ha obligado a posicionarse a las autoridades: este martes lo hicieron el Gobierno español y la embajada israelí en Madrid y unas horas después lo ha hecho también la representación diplomática norteamericana en nuestro país.
Los partidos políticos también se han posicionado con claridad en contra del veto, con la única excepción de Podemos e IU que lo han apoyado. Ciudadanos, además, ha anunciado que llevará la cuestión al Parlamento Europeo a través de su eurodiputado Juan Carlos Girauta.
También asociaciones judías de todo el mundo han protestado enérgicamente ante lo que el presidente de la Federación de Comunidades Judías de España, Isaac Querub, calificó en esRadio como la aparición "en el S XXI del estatuto de limpieza de sangre".