El Mundo se centra hoy en el terrorismo con dos titulares en portada. "Extreman los controles sobre 186 presos por riesgo yihadista". Y el atentado de ayer en Bangkok. "Aquí venimos a gastar, no a recoger cadáveres". En páginas interiores Cataluña cobra protagonismo. "Prohíben un logo de TV3 por imitar al de Mas". "Romeva defiende la reválida del 'president'". El presidente del Consejo editorial de El Mundo dice que Mas lo tiene todo bien atadito. "Las elecciones serán plebiscitarias si gana la lista única, aunque sea por un diputado más de la mayoría absoluta, y ello aunque no obtenga ni la mitad de los votos de los ciudadanos. Y, si no es así, serán unas elecciones autonómicas en las que será imposible formar un gobierno homogéneo, teniendo en cuenta que en la lista única, además de unos pocos políticos de derechas y de izquierda, hay cantantes, actores, futbolistas, juristas extraviados y profesionales del independentismo, esto es, una macedonia política que podría servir para todo, menos para gobernar". Lo mejorcito de cada casa. "Es posible, por tanto, que estas elecciones no tengan validez, es posible asimismo que la lista única obtenga menos escaños que los demás partidos y es posible también, con todo el derroche de medios con el que están presionado ala sociedad catalana, junto a la tonta pasividad de que viene haciendo gala el Gobierno de Madrid, que ganase la lista única". Así que en ascuas hasta el 27-S.
El País se cae del guindo y dice que "Convergència rechaza toda reforma constitucional". "Mas se enroca en la independencia y rechaza la reforma". ¡Ay va! ¡Qué me dices! Sorprendentemente, el periódico más progre es el único en dar caña por el episodio nazi vivido en Valencia con un cantante judío. "Judío sospechoso en la España del siglo XXI". "Compromís, que gobierna Valencia, lideró una campaña contra un cantante al que se exigió una declaración política para actuar". Incluso le dedica un editorial en el que denuncia que lo ocurrido es "inaceptable", "un hecho muy grave de discriminación política y religiosa ante el cual las autoridades políticas españolas no pueden permanecer al margen". Dice el periódico que Matisyahu fue “el único cantante a quien el Rototom -festival que recibe dinero público- exigió una declaración política previa, con el agravante de que se le exigió simplemente por ser judío, puesto que no es israelí”. “Que en la España del siglo XXI haya particulares y organizaciones que exijan declaraciones ideológicas para poder ejercer una actividad profesional nos retrotae a tiempos donde había que demostrar la religión y la limpieza de sangre para poder permanecer en la sociedad”. Concretamente, a la Alemania de Hitler. A ver si nos dejamos de rodeos. "El antisemitismo y la discriminación ideológica no admiten medias tintas. La crítica a la política israelí o la defensa del pueblo palestino no pueden amparar la persecución obsesiva de cualquier persona que pueda tener una posición ideológica diferente, o simplemente sea de religión judía. Los responsables políticos deben posicionarse sin ambigüedades respecto a este escándalo que hace dudar del respeto de la sociedad española a la pluralidad de ideas". Bien dicho, a cada uno lo suyo.
"Podemos contra Podemos. El desgaste en las encuestas desata la guerra interna con fuertes críticas al liderazgo de Pablo Iglesias", titula ABC. David Gistau nos pone los pelos de punta y dice que lo del cantante judío no es una anécdota, sino que tiene que ver con lo que está pasando en la España de Podemos y similares. "Una militancia mentalmente violenta e intransigente, que además siente que la hora española le pertenece, da rienda suelta, sin disimulo alguno, a sus odios y sus prejuicios. En este caso, el antisemitismo, pulsión vertebral de esa izquierda-web que va a refundarnos. Su fuerza es tal, y tan altanera, y tan dominante, que el director del festival se acobarda del modo más indigno posible y termina entregando a Matisyahu". De náusea. "Al artista intenta someterlo a una humillación con la que se le ofrece expiar sus pecados, retractarse y decir en público la verdad verdadera, cuya luz no lo ilumina, pobre hombre. En definitiva, se le ofrece ser reprogramado sin pasar siquiera por el psiquiátrico (…) ¿Es una anécdota o es una advertencia, entre otras, de cómo será la España de mañana? Cruel, intransigente". Da escalofríos.
La Razón dice que "Oriol Junqueras pugna por presidir la 'república catalana'". Este pobre tiene más valor que el Alcoyano, si ha perdido todos los pulsos con Mas. El editorial se empeña en taparse lo ojos con lo ocurre en Cataluña. "Estamos hablando de unas elecciones que no tendrán otro efecto institucional que el de conformar una nueva mayoría parlamentaria en la Cámara autonómica de la que emanará el Gobierno". Y continúa, erre que erre, "la ficción política de equiparar una mayoría plebiscitaria con una parlamentaria, por más absoluta en escaños que sea, no tiene recorrido. Acabará en el mismo momento en el que los diputados catalanes tengan que designar presidente de la Generalitat, dentro del respeto a la ley". ¿Respeto a la ley en Cataluña? Tú flipas. Aunque el notición de hoy La Razón es una exclusiva que lleva en su portada. "Vacaciones de lujo para Carmena: una villa de 4.000 euros a la semana". Caramba con los podemitas, si es que viven como marajás.
La Vanguardia está como El País, en Babia. "CDC rechaza participar en la reforma constitucional". "Nosotros ya estamos en otro escenario". Qué sorpresa. ¿Lo sabrá Rajoy?