El País, particularmente, se ha llevado un susto morrocotudo. "El PP da un fuerte giro a la derecha en vísperas electorales". "Elige a dos conservadores de perfil duro para Cataluña y la Comunidad Valenciana". Lleva el editorial a portada titulado "Premio a la xenofobia" y, para hacer rabiar al PP, le regala una página a Rivera, "La solución para Cataluña". Hala, chincharos. El editorial no deja títere con cabeza y da una idea del nivel de cabreo del periódico de Prisa. "Un extremista como candidato popular en Cataluña es una pésima noticia". ¿Para quién? Primero se lía a tortas con Sánchez-Camacho por no saber "reconducir" a Mas cuando le dio la ventolera independentista. A lo mejor le tenía que haber llevado a un reformatorio. "Convirtió un partido parlamentario en otro con maneras abruptas poco propias del parlamentarismo. Su final, pues es lógico. No tenía ya nada que ofrecer a nadie", dice en plena rabieta. La embestida cebrianita se centra después en García Albiol. "Albiol ha hecho toda su carrera casi exclusivamente al compás de las campañas xenófobas". "Nombrar candidatos de este perfil confirma el temor del PP a perder a sus votantes más radicales, pero enajena a los moderados y centristas, que son muchos más", dice. ¿Significará este ataque de cólera que el PP ha hecho diana?
Jesús García se encarga de hacer el perfil de "un político que agita con el racismo". "Provocador, directo", "un agitador profesional que ha sabido ganarse a una parte del electorado" que ha "cimentado su carrera en ataques contundentes, sin contemplaciones" y en "explotar el filón de la xenofobia". Y recuerda cuando en 2006 "dio un tortazo a un independentista que abucheó al ministro Acebes", qué momentazo. Aguirre debe estar celosísima. Yo me aparto, no sea que me caiga alguna.
El Mundo dice que "Rajoy confía a Albiol evitar la debacle del PP en Cataluña". El editorial, muy moderado, dice que Albiol es un dirigente "con un contundente discurso antinacionalista y con reputación de gestión eficaz, aunque la oposición le acusa de haber practicado una política xenófoba en su municipio". "Todo apunta, pues, a que Rajoy ha optado por García Albiol en un intento de recuperar parte del electorado que ha abandonado al PP. Pero eso va a ser muy difícil por la sencilla razón de que la formación de Rajoy carece en Cataluña de un discurso propio". No como Ciudadanos, "que sí ha tenido éxito donde el PP ha fracasado: en construir un discurso alternativo al nacionalismo, mostrando su sectarismo y sus miserias y sin dejarse amedrentar por Artur Mas". Y avisa al flamante candidato. "Sería un error disparar contra Ciudadanos porque las siglas de Rivera no son su enemigo. Lo esencial es que los partidos constitucionalistas saquen unos resultados que cierren el paso al soberanismo". El columnista podemita Antonio Lucas practica la oposición de la que habla el editorial. "El nombramiento de Albiol es un espectáculo de grada sur. Un tipo dotado para el linchamiento verbal de inmigrantes (…) la tamborrada de un españolismo fanático" y de "puerta de discoteca", "una puta vergüenza" que "sólo puede darse en un contexto de primitivismo y violencia". Córcholis. ¿Y este habla de linchamiento verbal? Pues él lo hace por escrito.
ABC dedicó ayer su foro a Cristina Cifuentes. "Sin las políticas del PP los españoles estaríamos en la pobreza". "Insta al partido a 'salir a la calle a explicar lo que se ha hecho' frente a un PSOE 'abrazado al radicalismo'. 'No es bueno para España que gobierne Podemos. Son caóticos'", advierte. Sobre Albiol dice que "el PP apuesta por perfiles fuertes para recuperar fuelle en Cataluña y Valencia". El periódico aplaude sin problemas este nombramiento. "Garcia Albiol llega para impulsar en el PP una nueva dinámica de debate y liderazgo ideológico. Albiol seguirá siendo objeto de las invectivas de la izquierda, con acusaciones de xenófobo y racista, precisamente porque lo ven como candidato con posibilidades de éxito". Así que ni pajolero caso. "El PP no debe preocuparse más de los juicios que hagan sus detractores, que sólo buscan su derrota hasta la marginación". García Albiol habla "claro y directamente a los ciudadanos sobre sus problemas cotidianos y centrado en la defensa de la Constitución". Y lanza un recadito a los maricomplejines del PP – te tomo prestada la palabra, Federico, pero es que creo que ya está en la RAE- "García Albiol será eficaz si el PP sigue al nuevo candidato y da un paso al frente para entrar de lleno en una confrontación democrática y argumentada" y no salen corriendo como conejos a la primera arremetida de la izquierda o cuando lean hoy El País. Ignacio Camacho ve que "la izquierda y el nacionalismo ya tienen un muñeco al que disparar (…) Su ventaja es que no sólo está acostumbrado sino que además no parece importarle". Sí, eso le va a ayudar. "Es un tipo echado para adelante cuyo lenguaje directo tiene tirón entre los partidarios de la 'derecha sin complejos'; un populista conservador que, a base de pisar calle, fue capaz de ganar en la roja Badalona". "Tiene un estilo desahogado, incorrecto, ruidoso, capaz de abrirse paso en un debate político de asfixiante hegemonía soberanista. Desde luego no constituye el tipo de candidato para el voto de centro". Puf, menos mal. Estamos hasta el gorro de políticos de centro. Queremos marcha.
La Razón dice que "Rajoy busca el 'efecto Albiol': el 37% del voto del PP se ha ido a Ciudadanos". Marhuenda da palmas con las orejas. "Albiol es una figura firme, de claras convicciones políticas, que vive con naturalidad la doble condición de catalán y español, y siempre muy cercano a los problemas y las opiniones de los ciudadanos". "Es un político diáfano, que reconoce y afronta los problemas y al que han acusado de populista precisamente los mismos que han pactado con lo peor del populismo. Su reto principal es recuperar a los votantes catalanes del PP que se han ido a Ciudadanos". Madre la que le ha caído a este hombre. Pilar Ferrer hace el perfil de este "valiente". "Su verbo ácido sin pelos en la lengua, su discurso agresivo contra le nacionalismo y su excelente gestión municipal, le hacían ser el favorito. Es una batalla electoral bronca y arisca en la que muy pocos quieren mojarse (…) Sabe que le van a dar hasta en la sopa, pero como buen deportista encaja los golpes". Vayan cogiendo sitio, empieza el espectáculo.
La Vanguardia se aleja de la línea de su hermano El País y está mucho más comedida. "El PP y Unió renuevan sus candidaturas para el 27-S" es el escueto titular. El editorial dice que "esta clara apuesta por la línea de mano dura y formalmente agresiva tiene el objetivo principal de recuperar votos que se han escapado a Ciudadanos". Enric Juliana, el alma del periódico catalán, está convencido de que es "un buen candidato para el PP" precisamente porque es "un tipo duro". "Que Albiol sea conceptuado por los electores de izquierda y por el público soberanista en general como un político con tentaciones xenófobas no es un asunto que tenga que preocupar mucho al PP". Al fin y al cabo pusiera a quien pusiera ni la izquierda ni los inde le iban a votar. "Xavier García Albiol no es un fanático de extrema derecha. Es un político profesional que un día llegó a la conclusión de que el PP sólo podía ganar en una ciudad como Badalona con un discurso muy próximo al lepenismo. Pidió autorización para llevar a cabo el experimento y se lo dieron. Y se gustó a sí mismo mientras lo llevaba a cabo". Uy, qué modosito está Juliana. Miedo da.