La diputada de UPyD, Irene Lozano, y tres dirigentes más del partido magenta enviaron este domingo por la noche a la Comisión de Garantías del partido una denuncia en la que reclaman la apertura de un expediente disciplinario a todos los integrantes del Consejo de Dirección, presidido por Rosa Díez, y que se les "suspenda inmediatamente de su ejercicio", informa El Mundo.
Según Lozano, los hechos denunciados son "gravísimos", en su opinión, y podrían constituir incluso delitos penados con hasta cinco años de prisión en el Código Penal. El escrito enviado a UPyD, al que ha tenido acceso El Mundo, relata pormenorizadamente que la dirección del partido rastreó correos electrónicos privados de algunos de sus dirigentes, filtró algunos a distintos medios de comunicación y, tras ello, elaboró un informe que se envió a los 150 miembros del Consejo Político de UPyD.
Según recoge El Mundo, Irene Lozano entiende que la intención de Rosa Díez y de la dirección del partido es atacar y desprestigiar su lista alternativa y así ganar el congreso extraordinario que se celebrará el 11 de julio y que elegirá a la nueva dirección de la formación magenta.
Por ello, Irene Lozano y otros tres dirigentes del partido, Luciana Miguel (portavoz y concejal en Segovia), Rodrigo Tena (exmiembro del Consejo de Dirección) y Félix Ortiz (miembro de la Comisión de Garantías), reclaman que sea la Comisión de Garantías la que asuma desde este lunes la organización del proceso electoral para elegir a una nueva dirección del partido; o que nombre a una gestora para llevar a cabo el congreso de julio "con imparcialidad".
Lozano también quiere conocer el "importe exacto invertido por el partido en este espionaje en plena campaña electoral" y pide que la dirección "cese en su política de acoso" a los afiliados que están tratando de poner en marcha un proyecto alternativo al de Rosa Díez.