Ciudadanos intenta enfriar un pacto con Cifuentes que la oposición madrileña da por hecho
Gabilondo y Podemos atacan a Aguado por tener "tics" de la "vieja política"
Tras el acuerdo por el que el diputado madrileño de Ciudadanos, Juan Trinidad, ha sido elegido este martes vicepresidente de la Asamblea de Madrid, el partido naranja intenta enfriar en público el acuerdo con el PP, aunque ya hay designado un grupo de trabajo, que encabezará el número dos de Ignacio Aguado, César Zafra, para implementar el casi seguro pacto de legislatura por el que Cristina Cifuentes será investida presidenta de la Comunidad de Madrid.
Pocas horas después del encuentro entre Aguado y Cifuentes del lunes, el vicesecretario general de la formación naranja, José Manuel Villegas, afirmaba en esRadio que el pacto está aún "muy verde", unas palabras que ratificaban tras el debate constituyente de la Asamblea de Vallecas los propios Aguado y Cifuentes. La líder del grupo popular afirmaba al respecto: "Apenas hemos empezado. Avanzaremos en las reuniones del miércoles y el viernes, tenemos mucho que hablar todavía".
Sin embargo, colgada la medalla de haber forzado las dimisiones de los consejeros imputados Lucía Figar y Salvador Victoria, en Ciudadanos ven buena predisposición de Cifuentes a aceptar su decálogo para la regeneración, cuyo asunto más espinoso para el PP es el compromiso para reformar la Ley electoral madrileña con el propósito de hacer obligatorias las primarias.
Aunque se insista en negarlo por las dos partes, el acuerdo para la constitución de la mesa de la Asamblea de Madrid, que otorga un papel a Ciudadanos mayor que el de sus diecisiete diputados, es el primer paso del futuro acuerdo de legislatura. El propio Aguado confía en el "talante" de Trinidad para "actuar como árbitro entre el bloque de izquierdas y la derecha madrileña". Lo cierto es que el futuro bloque gobernante tendrá mayoría con los tres representantes del PP y el de Ciudadanos frente a los dos del PSOE y el de Podemos. Un equilibrio de fuerzas muy distinto al que, según fuentes de Ciudadanos, querían los grupos de izquierda, por el que PP, PSOE y Podemos tendrían dos representantes y Ciudadanos uno. Algo que el propio Ángel Gabilondo ha confirmado como "una de las posibilidades que se pusieron sobre la mesa".
Tanto el líder de los socialistas madrileños como el de Podemos, José Manuel López, dan por hecho el acuerdo entre PP y Ciudadanos. El segundo ha señalado directamente a Albert Rivera: "Parece el único que cree que Esperanza Aguirre destapó la Púnica" mientras que Gabilondo negaba que lo hablado el lunes por Cifuentes y Aguado se limitase a aspectos técnicos: "Ha habido también una posición política. Tomamos nota. Nosotros vinimos a regenerar las instituciones. Me parece que los procedimientos de hoy, todos legítimos, han tenido algunos tics todavía muy convencionales, no exactamente de la nueva política y de la transformación que los ciudadanos proponen".
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