A las doce de la mañana, Susana Díaz, en el Parlamento andaluz, pronunciará su discurso previo a una hipotética investidura en el que tendrá que dejar reflejadas las claves que conduzcan a una investidura real bien mañana martes en la primera votación - que exige la mayoría absoluta-, o bien en la segunda - que sólo exigirá la mayoría simple -, el próximo jueves, un día antes del comienzo de la campaña electoral municipal en Andalucía y autonómica-municipal en buen número de autonomías españolas.
Las posibilidades reales de esta primera fase son las siguientes:
a) En la primera votación de mañana, 5 de mayo, tras el discurso de hoy, nadie vota a favor de Susana Díaz, lo que obliga a una segunda votación el jueves, 7 de mayo.
b) Ciudadanos, Podemos o el PP votan a favor de Susana Díaz, hipótesis que se considera imposible en el caso del PP, improbable en el caso de Podemos e incierta en el caso de Ciudadanos que, de firmar un acuerdo general con el PSOE sobre corrupción y asuntos económicos y sociales antes de la votación, ya no tendría razón para oponerse si bien tal apoyo no implicaría participación en el gobierno de Susana Díaz.
Hasta ahora, todas las fuentes y medios coinciden en señalar que Ciudadanos, por razones tácticas que no de fondo, no apoyará en una primera instancia a Susana Díaz.
Izquierda Unida no es relevante en esta fase porque se oponga o no, sus 5 diputados no permiten la investidura de Susana Díaz.
En la segunda fase de esta costosa y rocambolesca investidura, las posibilidades serían las siguientes:
a) Si el PP, o Podemos y Ciudadanos de forma conjunta, o Podemos e IU juntos, se abstienen, Susana Díaz saldría investida como presidenta de la Junta de Andalucía. Cualquiera de esas opciones permiten que los 47 escaños socialistas se constituyen en mayoría simple.
b) Si el PP se abstuviera y los demás partidos minoritarios votaran en contra, se obtendría el resultado siguiente: PSOE 47 a favor, 29 en contra y 33 abstenciones(las del PP).
c) Si Podemos y Ciudadanos se abstienen de manera conjunta y los demás partidos de la oposición votan en contra, el resultado sería 47 votos a favor de Susana Díaz, 38 en contra(PP+IU) y 24 abstenciones(15 de Podemos y 9 de Ciudadanos).
d) Si Podemos e IU se abstienen votando el resto de la oposición en contra, el resultado final sería la investidura de Susana Díaz por los 47 votos socialistas a favor, 42 votos en contra(de PP y Ciudadanos) y 20 abstenciones(de Podemos e IU).
e) Cabe la posibilidad asimismo de que en esta segunda vuelta, algún grupo decisivo e incluso IU, apoye directamente a Susana Díaz, que obtendría así la investidura con mayor brillantez.
De momento lo que se espera es el fracaso de la operación investidura en la primera fase y el triunfo en la segunda, lo que significaría que Susana Díaz habría logrado cuando menos, la abstención preferente de Podemos y Ciudadanos conjuntamente o, si no hubiera otro remedio, la del PP andaluz dada la posición de Mariano Rajoy sobre que no debe haber unas nuevas elecciones en Andalucía, elecciones que habría que convocar necesariamente en caso de que Susana Díaz no lograse ser investida el jueves.