La voladura de UPyD continúa, mientras sus dirigentes se aferran en público a que el proyecto es más necesario que nunca. Un argumento en el que insistía este jueves en TVE Andrés Herzog, el parachoques con el que Rosa Díez está capeando el temporal, mientras un titular algo forzado de El País le hacía decir hoy que Albert Rivera está poco menos que relamiéndose ante la desgracia magenta. Ocasión que el siempre hábil líder de Ciudadanos ha vuelto a aprovechar para aparecer como el bueno de la película: "Yo no disfruto con el mal ajeno, sino con el bien común".
En privado, admiten que la situación es muy complicada y se aferran al trabajo realizado para paliar, en la medida lo posible, la debacle de mayo. Como confiesa un cargo público del partido: "las andaluzas nos han golpeado muy fuerte, y no estaba previsto porque se adelantaron, pero obviamente Ciudadanos no ha irrumpido allí a nuestra costa, sino a costa del PP. Además, hay que tener en cuenta que las encuestas se están realizando en nuestro peor momento, aunque al menos todo esto tiene la ventaja de que nos está dando visibilidad". El mismo interlocutor se esfuerza en matizar la rebelión de las federaciones: "No nos engañemos, somos fuertes en Madrid, y aunque hemos trabajado internamente muy bien, las agrupaciones de fuera son muy amateurs. Te cuentan que ha habido una multitud aplaudiendo a Nacho Prendes y luego ves hoy en el telediario a cuatro gatos".
Mientras se cierra el acuerdo entre Ciudadanos y UPyD en Asturias, que terminará con Ignacio Prendes como candidato a las elecciones en el Principado, Aragón ha seguido sus pasos y Galicia tiene las horas o días contados. Pero según asegura a Libertad Digital una persona que conoce bien el proceso "la traca final llegará el lunes".
De momento Prendes, expulsado anoche del partido tras descubrirse que su secretaria, también expulsada de militancia, se inscribió como representante electoral de Ciudadanos ante la Junta Electoral asturiana, ha renunciado a su acta de diputado y ha anunciado la creación de una plataforma para acoger a "náufragos" que quieren el acuerdo con Ciudadanos.
Este jueves los seis cabezas de lista de UPyD-Aragón por Zaragoza, Huesca y Teruel junto con decenas de militantes, han anunciado su intención de buscar un acuerdo con Ciudadanos. El todavía coordinador territorial de UPyD-Aragón, Carlos Aparicio, ha declarado a los medios de comunicación que renuncia a su cargo orgánico y que se dará de baja de este partido en las próximas horas. "No soy el candidato de UPyD al Gobierno de Aragón" y "no voy a seguir como afiliado", ha recalcado.
Desde las filas de UPyD muchos consideran que el paso al frente dado por Irene Lozano podría desalentar a muchos de los que huyen. La candidata sigue de gira mediática y se prodiga en elogios inéditos a Rivera. Un esfuerzo vano, tal y como están las cosas. Un importante dirigente de Ciudadanos consultado por Libertad Digital deja claro que la diputada magenta no tiene cabida en la formación, pues nadie olvida las diatribas que en público y en privado ha lanzado, incluso cuando en el Consejo de Dirección del pasado 23 de marzo, el día siguiente de las elecciones andaluzas, arremetió contra los de Rivera como partido, entre otras cosas, poco firme contra la corrupción, al mismo tiempo que pedía la alianza como única tabla de salvación.
De momento Lozano cuenta como apoyo más relevante con el de su compañero de bancada en el Congreso Álvaro Anchuelo, que también dimitió del Consejo de Dirección tras el batacazo electoral en Andalucía.