La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, pide al Partido Popular que abandone el "grandísimo error" que supone la "tendencia" a rehuir el debate ideológico porque esa actitud genera desafecto en el electorado y no hay que fiarlo todo a la economía porque "no lo es todo".
En pleno debate interno sobre la estrategia del partido de cara a los próximos comicios tras el severo descenso de apoyos en las pasadas elecciones andaluzas, Aguirre lamenta en una entrevista con la Agencia Efe realizada el pasado miércoles la "tendencia" que aprecia en el PP a no dar esa batalla en un momento en que la situación es "muy difícil" y hay "una situación de peligro".
La candidata del PP a la Alcaldía de Madrid cree que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el resto de la formación están haciendo el análisis "necesario" después de que "posiblemente" el Comité Ejecutivo Nacional del PP no hubiese tenido tiempo de hacer un análisis "a fondo" y "autocrítica" al día siguiente de las elecciones andaluzas.
Una cuestión que previsiblemente centrará la reunión de la Junta Directiva Nacional del PP, convocada con posterioridad a la entrevista para el próximo martes y que reunirá por vez primera desde 2013 a la cúpula del PP para analizar la estrategia y perspectivas del partido ante el periodo electoral que se avecina.
Sobre hipotéticos relevos en la dirección del partido, la presidenta del PP madrileño recalca que lo que le ha escuchado a Rajoy es decir que quiere que la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, siga al frente. Por ello, considera que no va a producirse ningún cambio y añade que la continuidad de Cospedal le parece "estupendamente". "No tengo nada que decir en eso", zanja Aguirre.
Además de la insuficiente batalla ideológica, Aguirre reconoce que en los casos de corrupción radica también buena parte de la desafección de los ciudadanos hacia los políticos. Pone como ejemplo, ahora que se acaba de abrir el juicio por la primera parte del caso Gürtel -seis años después del inicio de la instrucción-, que cuando llegue una primera sentencia la gente "no se acordará ya" ni de "lo que han hecho" ni de "qué es Gürtel". Y en el caso de que alguien fuera inocente, agrega, estará "condenado previamente".
Por ello, la candidata a la Alcaldía de Madrid valora la reforma del Gobierno que acota los periodos de instrucción y se compromete a poner en marcha, como candidata, todas las medidas preventivas "posibles" contra los corruptos.
A la pregunta de si el PP ha gestionado bien los supuestos casos de corrupción que afectan a antiguos responsables de la formación, Aguirre contesta por ella misma: el primer auto del juez Garzón tras las primeras detenciones del caso Gürtel se conoció un viernes, y los implicados estaban destituidos o habían dimitido el lunes.
"Y a los diputados que no quisieron dimitir para no perder el fuero se les expulsó del grupo. Con la corrupción, tolerancia cero, ni media contemplación", recalca.
La presidenta del PP de Madrid cree que nada "garantiza" que no surja un corrupto y pide hacer caso omiso a los "cantos de sirena" de Podemos porque, al mismo tiempo que este partido dice que con ellos en el Gobierno "habría menos corrupción", han surgido informaciones que apuntan que cargos del gobierno venezolano "tienen el dinero" en Suiza y Andorra.
Aguirre rechaza que Ciudadanos pueda robar votos al PP porque las papeletas son de los ciudadanos y rechaza "futuribles" como concluir que las próximas elecciones autonómicas y municipales servirán de termómetro para las generales del otoño.
La presidenta del PP de Madrid niega tener "discrepancia" ideológica con Rajoy o marcar distancias con él y replica que su "disgusto" por la subida de impuestos es equiparable al del presidente del Gobierno.
"Otra cosa es que a él el señor Montoro le haya convencido de que era necesario, a mí no me ha convencido. Creo que los impuestos bajos garantizan el que suba la recaudación", concluye.