El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha dicho hoy en Jaén que el mayor problema del país es que "cada vez que se nos pregunta decimos lo peor" y que "no hay ningún país del mundo que tenga peor opinión de España que España". Así lo ha puesto de manifiesto durante su intervención en unas jornadas con empresarios organizadas por la Cámara de Comercio de Jaén tras ser interpelado sobre el final de la crisis.
En este sentido, ha asegurado que no tiene una "bola de cristal" y que si se tiene en cuenta que el objetivo final es tener más empleo, mientras haya más de cuatro millones de parados no se puede decir que la crisis ha terminado. Sin embargo, ha señalado que se pueden crear 500.000 puestos de trabajo cada año.
También considera que la recuperación en España "no es irreversible", ya que "sería muy fácil" que se revirtiera "solo con olvidar la hoja de ruta" que se fijó el Gobierno para evitar ser rescatados.
Ha señalado también que esa hoja de ruta es la adecuada para corregir los desequilibrios del empleo y que lo primero era la estabilidad macroeconómica, teniendo en cuenta que "hemos atravesado la crisis más grande de nuestras vidas".
No obstante, ha añadido que no solo hace falta actividad macroeconómica, sino también una política sectorial activa, porque en España sólo con el sector servicios y el primario no se pueden generar los empleos necesarios.