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Cuando Ciudadanos era la peste para 'El País'

El actual director del periódico nunca compartió la inquina hacia Albert Rivera en sus inicios políticos en Cataluña

Este lunes 2 de marzo la sede de Ciudadanos en Madrid estaba más concurrida que nunca. Albert Rivera presentaba ante cuarenta medios acreditados que se acomodaban con dificultad en la pequeña sala de prensa a los candidatos de la formación a la CAM, Ignacio Aguado, y al Ayuntamiento, Begoña Villacís. Entre bambalinas la plana mayor del partido, entre quienes el comentario más habitual, casi restregándose los ojos, era una referencia al reportaje a doble página que José Luis Barbería firmaba ese mismo día en El País con llamada en portada a dos columnas. De tertulia en una cafetería después del acto, sin la presencia de Rivera, que dedicó la mañana a atender personalmente a varios medios, varios miembros de la Ejecutiva del partido conversaban: "-¿Tú sabes lo que costaría eso si fuese una cuña? -Llevamos ya cuatro portadas -¿Cuatro? ¿Las has contado?".

En Ciudadanos aseguran una y otra vez que de la especial atención que les presta ahora el diario de PRISA son los primeros sorprendidos, pues no ha mediado ninguna gestión ni encuentro privado con directivos del periódico. Lo atribuyen a la evidencia de su crecimiento exponencial: "han sabido ver lo que no percibió UPyD con su cegera".

Antonio Caño, artífice del cambio

Hace justo un año llegó a la dirección del periódico, procedente de la corresponsalía en Washington, Antonio Caño, a quién se le atribuye el cambio de actitud de El País hacia los de Rivera, ignorados y atacados durante muchos años cuando empezaron a abrir brecha en Cataluña. Así lo hace Arcadi Espada, fundador de Ciudadanos por la misma época -mediados de la década pasada- en que abandonaba El País para fichar por El Mundo: "Caño, que entonces estaba al cargo del Domingo, en vez de optar por el insulto memo, quiso saber qué era Ciudadanos y traté de explicárselo en una conversación en Barcelona. Prometió ayudar al restablecimiento de la realidad, como pugnaba la frase final del manifiesto de los intelectuales, pero su poder era entonces limitado. Me alegra que sus límites sean hoy muy distintos".

De la inquina hacia la entonces incipiente formación, que presentaba entre 2005 y 2006 su iniciativa por toda Cataluña da cuenta también Espada al relatar los pormenores de su negociación con El País cuando ya tenía una oferta en firme de El Mundo para incorporarse como columnista estrella: "En una de esas reuniones se me ofreció formar parte de lo que llamaban el núcleo duro. 'Bien', dije, tan contento por la vanidad y el dinero. 'Pero…', enfilaron la adversativa, debes dejar el blog y eso de Ciudadanos. No me salía a cuenta".

Lo cierto es que una década después, con Antonio Caño en la dirección y las encuestas señalando a Ciudadanos como uno de los protagonistas indudables del cambio político en España, El País está siguiendo de cerca y en profundidad el fenómeno, lo que causa no pocos recelos.

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